La intensa lluvia fue la protagonista en el día de ayer en el Suroccidente asturiano, convirtiéndose en altitudes por encima de los 900 y 1.000 metros en nieve. Así, para ver el manto blanco en Cangas del Narcea había que acercarse a zonas como el alto del Acebo, a 1.180 metros; a pueblos como Genestoso, o al puerto de Leitariegos, situados en altitudes superiores.

En el concejo de Degaña, sin embargo, la nieve llegó a sus poblaciones principales, como Cerredo, situada por encima de los 1.000 metros. En la localidad, la presencia de la nieve provocó que durante el día se empezaran a registrar problemas intermitentes con la cobertura de internet y la señal de televisión. "La peor parte está llegando por la tarde, está nevando sin parar y estamos expectantes a ver cómo evoluciona", explicaba el presidente de la parroquia rural de Cerredo, José Luis Fernández. Las previsiones para hoy son de más nieve para toda Asturias. Los mayores espesores, de entre 60 y 80 centímetros, se esperan para la cordillera Cantábrica.

En el oriente asturiano, el temporal de nieve obligó a mantener cerrado ayer al tráfico un día más la carretera de acceso a los Lagos (CO-4). El manto blanco comenzó a dejarse ver a la altura del Mirador de la Reina y ascendió a los diez centímetros en el entorno del lago Enol. Pese a que los carteles informativos anunciaban el corte de la vía, las barreras recientemente instaladas en la rotonda de Covadonga permanecieron levantadas, permitiendo en la práctica el paso de vehículos.