"A la vista del caudal con el que bajan los ríos, estas inundaciones no son atribuibles a falta de conservación de los cauces, aunque en algún caso puntual la presencia de troncos o ramas en un puente puedan ayudar al desbordamiento. Pero las vegas han sido siempre zonas en las que se desbordan los ríos", señalaron ayer fuentes de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC), que reaccionaban así a las quejas de afectados por la ausencia de limpieza y mantenimiento en varios cauces de la región. La CHC defendió el "esfuerzo" del departamento en materia de limpieza de cauce: "Estamos actuando y vamos a seguir actuando, incluso en zonas que son competencia de los ayuntamientos", añadieron.

Porque el ámbito competencial de la Confederación en materia de limpieza de ríos se limita a las áreas situadas fuera de los ámbitos urbanos. En las zonas habitadas (ciudades, villas, pueblos y aldeas) la competencia corresponde a los ayuntamientos, tal y como señala la jurisprudencia.

Pese a ello, "la vocación de la Confederación es colaborar con los ayuntamientos, porque la limpieza de los cauces es un problema de todos", señalaron las fuentes consultadas, que destacaron que el pasado mes de noviembre el departamento que encabeza Manuel Gutiérrez encargó a la empresa pública Tragsa actuaciones de limpieza en ríos de toda la región por valor de 600.000 euros para acometer 151 actuaciones en 59 municipios. Ya se han gastado 160.000 euros y los tres equipos (Occidente, Centro y Oriente) han realizado tareas en 16 municipios, acometiendo las tareas "más urgentes". Además, en diciembre pasado la CHC acordó reforzar esas labores y destinar más dinero a labores de limpieza y conservación de ríos.

En cuanto a la incidencia que las tareas de limpieza pueden tener en caso de aumento del caudal de los ríos, las fuentes consultadas destacaron que puede ser, simplemente, "coadyuvante" en algunos casos, principalmente en el caso de ríos pequeños. "Puede haber problemas puntuales de atascamientos, pero los desbordamientos de ríos como el Caudal, el Nalón, el Sella, con caudales de esta magnitud... no puede atribuirse a la falta de limpieza", añadieron.

Las quejas de los afectados por las inundaciones continúan mientras tanto. Ayer, vecinos que residen en las inmediaciones del río Bedón (Llanes), que se desbordó en las vegas de Frieras, San Martín y El Molín de San Antolín, y del Sella, desbordado en varios puntos, denunciaron que llevaban "varios meses" reclamando que se dragaran los cauces y se acometieran tareas de limpieza. Algunos de ellos lo solicitaron por escrito en sus respectivos ayuntamientos, pero no obtuvieron respuesta positiva.