Las obras para construir la escollera "de emergencia" que evitará el derrumbe del Corredor del Nalón a la altura de Blimea ya han comenzado. El primer paso fue el de llevar y poder meter la gran máquina de "brazo largo" con la que se colocarán los bloques en la orilla del río Nalón. La operación se llevó a cabo durante la tarde. También se construyeron unos accesos rodados para que los camiones que transporten el relleno de la escollera puedan llegar a la zona. En juego está impedir que se desplome la principal vía de comunicación del valle del Nalón, que amenaza con venirse abajo en una zona en la que podría dejar casi incomunicados a 16.000 vecinos.

Los trabajos se van a desarrollar de tal forma que no sea necesario cortar el tráfico en el Corredor del Nalón. Se cerrarán el arcén y el carril en sentido Langreo -que amenazan con caer si el río sigue "comiendo" la escombrera sobre la que se asienta la vía-, y el tráfico se canalizará por el otro arcén y por el carril en sentido Laviana. Por este espacio el tráfico podrá circular en ambas direcciones a la vez, con conos separando los carriles y con una velocidad limitada. El Principado "garantiza" la seguridad de la vía.

El director general de Infraestructuras, José María Pertierra, visitó ayer la zona afectada junto a los alcaldes de San Martín del Rey Aurelio (Enrique Fernández), Laviana (Julio García), Sobrescobio (Marcelino Martínez) y Caso (Miguel Fernández). Estos tres últimos concejos son los que podrían quedar casi aislados en caso de que el Corredor tuviese que ser cortado. La vía alternativa, la AS-17, está inutilizable entre Barredos y Blimea por culpa de un argayo de grandes dimensiones que tapona la carretera. También estuvo en la visita el presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Manuel Gutiérrez.

En principio, la empresa encargada de la obra, Excade (que se encargó de retirar y estabilizar el "argayón" de Caso), iba a utilizar maquinaria "de brazo largo" desde la plataforma de la carretera, de arriba abajo. Finalmente, el plan de obra ha cambiado, y se considera mejor opción meter la maquinaria junto al río Nalón. Se van a construir unas "islas" con las piedras del cauce para asentar la grúa que irá colocando el muro de emergencia, que deberá detener la constante erosión a la que el río somete a la escombrera. El plazo de ejecución de la obra no está definido, pero será de al menos "varias semanas".

Hay un segundo punto del Corredor, en el enlace de El Entrego a la altura del Museo de la Minería, que también sufre problemas, pero de momento la actuación de Blimea se considera "prioritaria".

La situación en la que se encuentra el Corredor ha generado alarma y críticas vecinales. También reproches desde IU en el valle del Nalón. En San Martín del Rey Aurelio llegó a presentarse una moción hace meses alertando del desgaste de la ladera, y reclamando entonces soluciones. Pertierra aseguró ayer que "se hacía seguimiento y se tenían en cuenta" estas advertencias.

El director de Carreteras también explicó que a lo largo del temporal, 203 de las 470 carreteras de la red regional sufrieron incidencias graves, 49 de ellas cortes totales. Estos cortes, ayer por la mañana, aún afectaban a ocho viales.

En las Cuencas, además, los problemas del temporal no se limitan al Corredor del Nalón. En Mieres y Langreo hay familias que permanecen desalojadas. Pueblos en la zona de San Tirso están casi incomunicados, situación similar a la que desde ayer sufren los vecinos de Nieves (Caso), cuya carretera de acceso se vino abajo ayer en un tramo de unos 35 metros. En Aller las comunicaciones también son muy complicadas.