El temporal con fuertes rachas de viento y oleaje que azota este fin de semana con fuerza se está dejando notar con fuerza en la costa gijonesa, donde la boya de puertos del Estado registró la pasada madrugada olas de casi diez metros. El parámetro más elevado, hasta ahora, se registró a las dos de la mañana, con un ola de 9,69 metros. Además, la Policía Local de Gijón procedió a acordonar por la mañana el perímetro circundante tras la iglesia de San Pedro que mira hacia la bahía de Gijón, como medida de precaución. Y durante la noche del viernes la caída de andamio en la calle Ribadesella obligó a realizar una intervención de emergencia a los Bomberos. La red de unos 20 metros que cubría el andamiaje del inmueble se encontraba desprendida y golpeando en el edificio de enfrente como si se tratara de la vela de un barco debido a las fuertes rachas de viento.