La Administración central está dispuesta a implicarse más en el parque nacional de los Picos de Europa y, si las comunidades autónomas que lo integran lo reclaman, a explorar "nuevos mecanismos de cooperación" para mejorar su gestión, señaló ayer en San Xuan (Ponga) el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, durante una visita en la que entregó a la alcaldesa, Marta Alonso, el diploma de la Unesco que convierte al municipio en la séptima reserva de la biosfera de Asturias.
Morán recordó que son las comunidades autónomas las que tienen las competencias exclusivas en materia de gestión de parques nacionales, pero subrayó que el Estado no ha abdicado "en ningún momento" de sus "responsabilidades de cooperación". Más aún: está "dispuesto a explorar cualquier tipo de colaboración, más allá de la existente en estos momentos", resaltó Morán. "Avanzaremos hasta donde las comunidades autónomas crean que es necesario", añadió.
El secretario de Estado puso como ejemplo la reciente creación del parque nacional marítimo de Cabrera, en las Islas Baleares, colindante con otro anterior en manos de la comunidad autónoma, lo que ha obligado a pactar "nuevos mecanismos de colaboración" entre la Administración del Estado y el Gobierno regional. Este podría ser un ejemplo para los Picos de Europa, según Morán. "Siempre que sea posible mejorar la gestión de estos espacios y que esto revierta en mejorar la calidad de vida de las gentes que viven en esos espacios no tenemos porque renunciar a ninguna de las posibilidades que haya", indicó.
Morán firmó en el libro de honor del Ayuntamiento de Ponga y, tras la entrega del diploma de la Unesco, resaltó el enorme "capital natural" que posee el concejo, con poco más de 600 habitantes. Morán señaló que en los procesos de despoblamiento influye "decisivamente" la deslocalización de las actividades económicas. Pero "lo que no se puede desplazar es el capital natural", resaltó, para añadir que hay que hallar "herramientas que permitan concitar el encuentro entre el capital no deslocalizable y la capacidad de generar actividades económicas" para que "la gente se quede en estos territorios".
Cree que aún no es tarde para Ponga, pero admitió que la Unión Europea sí ha tardado "mucho tiempo" en percatarse de que el despoblamiento "no afecta a un solo país, ni a un solo territorio"; que provoca "un enorme desequilibrio" en toda Europa, y que requiere "una respuesta de carácter continental, que debe formar parte de las políticas de estado". Aseguró que sí lo ha entendido así el Gobierno socialista "y por eso creó el Alto Comisionado para la Lucha contra la Despoblación", y también el Grupo Socialista en el Parlamento Europeo que ha defendido la inclusión de "medidas de lucha contra la despoblación en todas las políticas con carácter transversal".
El secretario de Estado destacó el "esfuerzo" de los habitantes de territorios como Ponga por mantener el "capital ambiental", algo que a su juicio no se ha visto "compensado en términos de reciprocidad por parte de la sociedad". Una sociedad urbana que no es capaz de "evaluar los beneficios que estos espacios generan para el conjunto de la población en términos de salud ambiental y calidad de vida". Y "como esto no forma parte de los presupuestos caemos en el error de que creer que es irrelevante, porque parece que aquello que no tiene precio carece de valor. No es así: sin esa capacidad de puesta en valor del capital natural este país no sería lo que es hoy", señaló Morán. Y no se ha retribuido correctamente a las gentes que han conseguido mantener ese valor ambiental en los términos en los que hoy podemos disfrutarlo", concluyó.
La Alcaldesa expresó su convencimiento de que la declaración de Ponga como reserva de la biosfera servirá, por un lado, para atraer ayudas y subvenciones para mejorar el concejo, y por otra, para abrir "una ventana al mundo" y dar a conocer el municipio y su enorme calidad paisajística en el exterior.
Según el Gobierno del Principado, la declaración contribuirá al desarrollo sostenible del concejo, la preservación de sus valores naturales y culturales y el fomento de la cohesión territorial. El espacio que ocupa la reserva coincide con el territorio del parque natural de Ponga, que abarca todo el municipio (20.506 hectáreas). El entorno se caracteriza por su gran diversidad y su elevado grado de conservación y los ecosistemas más abundantes son los bosques (hayedos y, en menor medida, con robledales albares, rebollares, bosques mixtos y castañedos) que ocupan aproximadamente el 40 por ciento de la superficie.
Las reservas de la biosfera fueron definidas en 1974, en el marco del Programa El hombre y la biosfera (MAB, en sus siglas en inglés) de la Unesco, y se aplica a territorios que albergan importantes valores naturales, a los que se suma el patrimonio cultural existente, y donde la población manifiesta la voluntad de aplicar un modelo de desarrollo respetuoso con dichos valores.
La Alcaldesa y el director-conservador del espacio protegido del municipio y gestor de la nueva reserva de la biosfera, Rafael Fernández, recogían ayer el diploma acreditativo en el centro de interpretación del parque natural, en San Juan de Beleño. La concesión se había hecho pública el pasado mes de julio. También asistieron al acto el viceconsejero de Medio Ambiente, Benigno Fernández Fano, y el director general de Biodiversidad, Manuel Calvo. Todos ellos, junto a Hugo Morán, visitaron el mirador de Les Bedules.
La red española de reservas de la biosfera está formada por 49 espacios distribuidos por 15 de las 17 comunidades autónomas. En Asturias, son siete:
-Somiedo: declarada en 2000.
-Muniellos: declarada en 2000 y ampliada a todo el Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias en 2003.
-Redes: declarada en 2001.
-Picos de Europa: declarada en 2003.
-Rio Eo, Oscos y Terras de Burón: declarada en 2007.
-Las Ubiñas-La Mesa: declarada en 2012.
-Ponga: declarada en 2018.
