Con el triple de alcohol permitido. Así pilló hace unos días la Guardia Civil a un camionero en la Autovía del Cantábrico, a la altura de Villaviciosa, concretamente en el kilómetro 346. Era de madrugada, sobre la una y cuarto, y los agentes, que estaban haciendo un control, observaron un camión que avanzaba a una velocidad excesivamente lenta. Hicieron que se parase y al acercarse a la ventanilla apreciaron un evidente y fortísimo olor a alcohol.

Los agentes decidieron realizarle al conductor la prueba de alcoholemia. Ésta arrojó unos datos en aire espirado de 0,48 miligramos por litro de aire espirado en la primera y 0,45 en la segunda, más del triple de la tasa permitida para estos profesionales, que es de 0,15 miligramos. El vehículo permaneció inmovilizado hasta que el conductor arrojó una tasa negativa en alcoholemia y pudo continuar la marcha. Porcedía d ela localidad oscense de Binéfar y transportaba mercancías perecederas.

Desde la Guardia Civil se recuerda la incompatibilidad de la conducción de vehículos a motor después de haber ingerido previamente alcohol o con presencia de drogas en el organismo. Asimismo se recuerda también que conducir con una tasa de alcohol que supere el los 0,60 miligramos por litro de aire espirado, o 1.2 gramos por litro de sangre, supone un delito contra la seguridad vial que puede conllevar hasta tres meses de cárcel.