El Principado activó ayer por primera vez de forma simultánea en los concejos de Oviedo, Gijón, Carreño, Siero, Noreña, Ribera de Arriba, Llanera y la zona industrial de Morcín el nivel 1 del protocolo anticontaminación, que implicará hoy restricciones en el tráfico, la industria y el campo. La directora general de Prevención y Control Ambiental, Elena Marañón ha declarado antes de la reunión de la comisión de valoración y seguimiento del protocolo de actuación en episodios de contaminación del aire, que también han convocado a los miembros de Avilés dado que "previsiblemente hay que activar en la zona de Avilés". "Vamos a ver las predicciones meteorológicas para ver si es procedente o no activar en la zona de Avilés", ha asegurado.

La decisión se tomará en la reunión que esta mañana mantiene la comisión de seguimiento y valoración del protocolo, después de que el Gobierno regional lo activara ayer en nivel 1 (aviso).

"Son medidas complicadas que requieren una coordinación importante entre las tres administraciones", ha afirmado Marañón, que también ha declarado que van a comprobar qué zonas son las más afectadas por la contaminación.

En el encuentro, la comisión analizará los niveles de contaminación y las previsiones meteorológicas para Avilés para estudiar la necesidad de activar el protocolo en esta otra zona del área central.

A este respecto, el Colectivo Ecologista de Avilés (CEA) ha reclamado hoy al Gobierno de Asturias que active el protocolo 1 de contaminación del aire en el área de la comarca al estar "muy afectados" los concejos de Avilés, Castrillón, Corvera, Carreño y Gozón tras cuatro días con "una contaminación fuera de norma".

El nivel de aviso 1 incluye restricciones al tráfico de vehículos pesados de mercancías, riego de viales y limitación de la velocidad en las carreteras de la red estatal y autonómica, entre otras, además de las contempladas en el nivel 0 (preventivo).

Entre ellas figuran que se proceda al seguimiento de la contaminación por parte del Principado y el traslado de la información al resto de administraciones concernidas, así como a las empresas con actividades potencialmente contaminantes en el área de influencia.

Además se prohíben las quemas de restos vegetales y se recomienda la utilización del transporte público y el uso compartido del vehículo privado y los ayuntamientos afectados pueden adoptar las medidas que consideren adecuadas para reducir la polución como el riego de viales y carreteras o el reforzamiento de la inspección.

A finales del pasado año y comienzos de 2019 en Oviedo y en las comarcas mineras el protocolo estuvo activado en nivel preventivo durante doce jornadas, situación que se reactivo durante una jornada pocos días después.

En las últimas semanas organizaciones ecologistas venían reclamando al Gobierno regional que activase el protocolo y desde la Viceconsejería de Medio Ambiente se advirtió de que esa medida se atiene a una regulación muy estricta y que hasta ahora no se habían dado las condiciones establecidas para ponerlo en marcha.

De acuerdo con lo establecido en el protocolo, para proceder a su activación deben darse de forma simultánea dos condiciones, que se superen los umbrales fijados durante al menos 3 días consecutivos en una estación y que exista previsión de fenómenos meteorológicos que dificulten la dispersión de contaminantes en la atmósfera.

El consejero de Sanidad, Francisco del Busto, ha expresado su preocupación por los episodios de contaminación, si bien ha afirmado que no se han producido situaciones de alarma sobre la salud de las personas.

Tras recordar que Asturias está lejos de tener el problema de contaminación de Madrid o Barcelona, Del Busto ha avanzado que el Gobierno asturiano aprobará en los próximos días un plan de asistencia sanitaria y medio ambiente que incidirá en el trabajo relacionado con la contaminación.

El consejero ha recomendado que se beba mucha agua y que se eviten en la medida de los posible las zonas con más contaminación, si bien ha remarcado en que no se debe crear una alarma excesiva ante estos episodios.