El presidente del Principado, Javier Fernández, se ha extendido esta mañana en la Junta en el desmenuzado de sus abundantes discrepancias con los planes que sobre la transición del modelo energético sostiene el Gobierno socialista de Pedro Sánchez. En la sesión bisemanal de preguntas al presidente, y en respuesta a las inquietudes planteadas por IU y PP, el jefe del Ejecutivo autonómico incluyó a Hunosa en la lista de posibles damnificados. En su larga exposición, Fernández alertó sobre los posibles efectos de la disposición del anteproyecto de ley recién presentado por el Gobierno en la que se plantea que en dos años se elaborará un calendario de los plazos para que el Estado y todas las entidades públicas "se desprendan de participaciones en las empresas que procesen producciones de origen fósil". Eso afecta de lleno a la hullera pública, concernida pues en el plan de futuro autorizado por el Gobierno "no sólo por el cese de la explotación minera, sino por la central térmica (de La Pereda), que utiliza productos fósiles", destaca el Presidente.

Javier Fernández fue dejando en sus respuestas a los grupos de la oposición retazos de su rechazo a los postulados energéticos del Gobierno estatal. Y tras repetir que el Principado presentará alegaciones "con todo el rigor técnico y jurídico" también sostuvo que las previsiones de generación energética de fuentes renovables sería "en ausencia de carbón y con menos energía nuclear insuficiente para dar potencia firme al resto de la generación y evitar las fluctuaciones del sistema". En el nuevo escenario, que Fernández repitió que considera demasiado acelerado y potencialmente perjudicial para la industria asturiana, la región tampoco "reúne las condiciones para ser una potencia en la tecnología eólica, por nuestros rangos de vientos insuficientes", y no hacía falta decir que tampoco en la solar. Sin llegar a pedir la retirada total del plan que le demandaba la portavoz de IU, Concha Masa, el presidente también reiteró que no habría garantía de suministro fiable para la industria advirtió del riesgo de que Asturias vuelva a ser lo que ya fue en el pasado, una "isla" energética, dada la demora prevista en la construcción de las conexiones de las nuevas instalaciones de generación eléctrica mediante energías renovables.

Ciudadanos llevó a la sesión las demandas a su juicio poco combativas del Principado respecto al corredor ferroviario atlántico y Javier Fernández le reprochó su apoyo a los presupuestos del PP que retrasaron la Variante de Pajares. A la denuncia de Podemos sobre la insuficiencia de las políticas de igualdad y la persistencia de la brecha salarial en Asturias respondió remitiéndose a lo hecho y a la intención de seguir por el mismo camino, no sin antes reprochar a la formación morada un intento de "patrimonializar la lucha de las mujeres cuando se acerca el día correspondiente", el 8 de marzo. A Foro y su acusación de pasividad sobre la crisis demográfica le repitió que en este punto nada será eficaz si se hace sólo desde Asturias y sin una política global desde el Estado.