La asociación "Deporte vs Cáncer Infantil" ha donado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) tres coches de juguete y un ecógrafo de altas prestaciones. Los vehículos, dos descapotables y un coche de bomberos, están dirigidos por control remoto y servirán para conducir a los niños hasta los quirófanos. La familia del pequeño Manu Barrero, fallecido el pasado mes de agosto, ha sido uno de los motores de esta iniciativa: "Es un deseo que tenía Manu, él no ha podido verlo pero sí está en la mente y en los corazones de todos". Para los responsables del hospital, la llegada de los coches ha sido "como un regalo de Reyes". El gerente, Luis Hevia, destacó el "trabajo de humanización" que se lleva a cabo en el área pediátrica.