El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha dado por concluida, con resultado "satisfactorio", la fase de pruebas para la implntación del sistema de control del tráfico ERTMS, el más propio de la alta velocidad ferroviaria, en el tramo entre León y Valladolid. En cuanto se implante, el modelo permitirá alcanzar velocidades de hasta trescientos kilómetros por hora a los convoyes que circulen por la vía de AVE y es el siguiente paso para subir sus prestaciones, permitiendo ahorrar diez minutos en el viaje en tren entre Asturias y Madrid. Los trenes de pruebas han completado 7.800 kilómetros por el tramo de 165 que une León, Palencia y Valladolid y a partir de los datos recopilados se elaborará el Informe de los Recorridos de Fiabilidad, con lo que Adif cierra la documentación de esta fase, paso previo a la solicitud de puesta en servicio a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF).

El sistema ERTMS de nivel dos es un mecanismo de supervisión permanente del tren, según el estándar europeo. La comunicación entre las instalaciones de vía y los equipos embarcados en los trenes está basada en el sistema radio GSM-R del tecnólogo Nokia. La implantación del sistema llegará en todo caso con retraso, toda vez que el Adif llegó a tenerlo previsto para el último trimestre de 2017.