Pablo Casado tuvo que pararse varias veces en su paseo por las calles de Oviedo tras firmar la coalición electoral PP-Foro en el hotel de La Reconquista. Hubo más de una anécdota en el tránsito del conocido hotel a la Catedral de Oviedo, pero la palma se la llevó lo acontecido en la calle San Francisco. El presidente del PP fue abordado allí por un espontáneo y terminó hablando por teléfono con su madre.
Era un hombre que portaba un purito en una mano y una bolsa de plástico en la otra, con llamativas gafas de sol. "Estoy emocionado", dijo con exaltación. Y consiguió su objetivo: que Casado hablase por teléfono con su madre, vecina de Ciudad Real. "Se llama María Jesús, no se lo va a creer", le contaba este hombre a Casado. Pese a la impaciencia de Canteli y del equipo del presidente del PP, logró su objetivo tras varios intentos fallidos de contactar con su madre a través del móvil.
"María Jesús, soy Pablo Casado. Estoy con su hijo en Oviedo (...). Sí, sí, Pablo Casado", dijo el líder popular tras coger el móvil del transeúnte que le abordó. Fue una conversación breve pero intensa. Tan intensa que a María Jesús, tras la misma, no le había quedado claro con quién había hablado por teléfono. "¡Que sí madre! Mira el telediario, voy yo con él. Aquí estoy, con un plátano y un kiwi (en referencia al contenido de su bolsa)", le decía a María Jesús su hijo tras volver a coger a su móvil. "¡Mamá, que salgo en el telediario, con Casado!", no paraba de repetirle con la ilusión de un niño. La mujer no terminaba de creérselo.
