El presidente de Vox Asturias, Rodolfo Espina, ha cargado duramente esta mañana contra el rector de la Universidad de Oviedo, Santiago García Granda, por secundar la huelga feminista de mañana. La formación de Santiago Abascal ha denunciado que tanto el Rectorado como los decanos de las facultades están pidiendo a los profesores "no realizar pruebas, exámenes o similares" este viernes y "actuar de forma pasiva o positiva ante los estudiantes que no acudan a sus clases". Todo ello supone, a juicio de Rodolfo Espina, "una irresponsabilidad", pues "facilitar el desarrollo de una huelga nada tiene que ver con los deberes y obligaciones de una universidad pública". Y dice más: "Hay que tener la cara muy dura para estar exigiendo un contrato programa con fondos públicos a la vez que se facilita, sino promueve, la inactividad de estudiantes y profesores".

Los estudiantes se felicitaban la pasada semana por conseguir "por primera vez en la historia" que la institución académica asturiana apoyase la huelga del 8 de marzo. Sin embargo, Vox Asturias discrepa con la decisión tomada por el Rectorado: "La Universidad de Oviedo recibe fondos de todos los asturianos para desarrollar el trabajo de formación universitaria en sus clases, talleres y laboratorios, y para promover la investigación básica y aplicada. Esos dineros públicos exigen una responsabilidad en su destino que parece situarse al margen de los principios de dirección y gestión que sigue el Rector para que la Universidad trabaje, como debe hacer, mañana viernes". El comunicado firmado por Rodolfo Espina continúa así: "La Universidad de Oviedo tiene serios problemas de calidad en su docencia e investigación que exigen la máxima atención de todos, en primer lugar, del propio Rector. Tiene muy malos ratios de empleabilidad, claramente relacionados con el deterioro de la enseñanza universitaria y con la mediocridad en los objetivos docentes de sus centros y grados". Y añade: "Nadie es "excelente" facilitando, sino apoyando, el desarrollo de huelgas a sus estudiantes. Un día sin clase es un día sin recibir formación, y eso, en ningún país que se crea desarrollado es permisible".

Para Vox, "la obligación de los estudiantes, que cuestan mucho dinero a todos los españoles, es formarse en calidad y en cantidad", y la de los profesores, "dar sus clases de la mejor manera posible y con el mejor contenido formativo". Finalmente, "la del Rector y los decanos de los Centros debe ser la de organizar, facilitar y promover las mejores condiciones de docencia e investigación". Por eso, opinan, "resulta impresentable el comunicado que está llegando al profesorado. Es inadmisible la posición que está tomando el Rectorado".

Vox asegura que si consigue representación en la Junta General del Principado tras las elecciones de mayo exigirá la comparecencia de Santiago García Granda para que "explicaciones de esta y otras decisiones similares durante este ejercicio económico" y llevará una propuesta para retirar los fondos correspondientes "a un día sin actividad docente". El presidente del partido en Asturias concluye su comunicado así: "Hay que tener la cara muy dura para estar exigiendo un contrato programa con fondos públicos vinculados a los resultados de la Universidad a la vez que se facilita, sino promueve, la inactividad de estudiantes y profesores. Que el Rectorado vaya asumiendo que Vox será, a partir del 26 de mayo, extraordinariamente exigente con su gestión".