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Un problema medioambiental al que se enfrenta la región

El 45% de los asturianos se conecta a redes de saneamiento fuera de norma

La "deuda" del Estado con la región por obras de depuración comprometidas y no ejecutadas supera los 180 millones de euros

Solo un 55 por ciento de la población asturiana que reside en aglomeraciones de más de 2.000 habitantes (poco más de 550.000 personas) está conectada a instalaciones que cumplen la directiva comunitaria de tratamiento de aguas residuales urbanas, aprobada en 1991, mientras que un 44 por ciento se conecta a colectores que la incumplen y el 1 por ciento restante depende de sistemas en fase de construcción o puesta en marcha.

La situación preocupa a las autoridades del Principado, que reclaman una "apuesta decidida" por parte del Estado, ya que, tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA hace un mes, Asturias es la segunda comunidad autónoma con mayor porcentaje de incumplimientos de la directiva, solo por detrás de Andalucía. Y la "deuda" de la Administración central con Asturias por obras comprometidas y no ejecutadas en materia de depuración supera los 180 millones de euros.

Los incumplimientos más relevantes afectan a los saneamientos de Gijón Este, Gijón Oeste y Avilés. Pero no son los únicos: de las 29 aglomeraciones urbanas asturianas con más de 2.000 habitantes, solo 17 cumplen la directiva, que exigía sistemas de depuración con tratamiento secundario (biológico) en todas la aglomeraciones de más de 15.000 habitantes el 31 de diciembre de 2000 y en las que tienen entre 2.000 y 15.000 habitantes el último día del año 2005.

El Tribunal de Justicia Europeo condenó el 25 de julio de 2018 a España por incumplir la directiva y una sentencia anterior (de 2011) referida a carencias en 9 aglomeraciones, entre ellas la de Gijón Este. La multa ascendió a 12 millones de euros, más 10,95 millones por cada semestre de retraso en el cumplimiento de la sentencia. El último informe sobre depuración de aguas residuales urbanas, de 2018, concluye que siguen incumpliendo la directiva comunitaria 12 instalaciones asturianas: Arenas, Avilés, Castropol. Frieres, Gijón Este, Gijón Oeste, Las Caldas, Luarca, Nora-Noreña, Ría de Navia, Sella-Piloña y Villaviciosa. La situación de las principales redes de saneamiento de la región es la siguiente:

Avilés. La depuradora de Maqua funciona desde 2004 y para cumplir las exigencias europeas requiere una remodelación y un acondicionamiento de las instalaciones para mejorar el tratamiento secundario (en la actualidad no alcanza las exigencias comunitarias) y el control de los vertidos. El Estado estima que el gasto alcanzará los 39,8 millones (más de lo que costó). El proyecto está solo a falta de consultas y el trámite de evaluación ambiental simplificada.

Bajo Nalón. La depuradora, construida en 2001, funciona con normalidad y ya cumple la normativa europea, tras concluir en noviembre de 2017 las obras de mejora de los colectores que incorporan los vertidos de Salas y Cornellana, lo que supuso un gasto de 819.000 euros.

Castropol. La depuradora de aguas residuales del Eo funciona desde 2018 (costó 4,48 millones), y Castropol y Figueras ya tienen saneamiento, tras una inversión de 4,35 millones. El saneamiento de Vegadeo y varios núcleos menores de Castropol concluyó hace unos meses, gracias a una inversión de 3,55 millones. El 95 por ciento de la población ya tiene servicio de saneamiento. Resta incorporar los núcleos de Piantón y Tol, así como un tanque de tormentas y varios colectores, entre ellos el del río Mojardín, prometidos por el Estado.

El Franco. Hay muy poca población conectada a la red de saneamiento. Falta del desarrollo de la red de alcantarillado municipal. De la depuradora solo funciona el pretratamiento y de ocho bombeos solo funcionan seis.

Frieres (Laviana). La depuradora funciona con normalidad y cumple los parámetros de la normativa europea. Se ha ejecutado el colector de Villoria, que costó 2,96 millones, y está pendiente el acondicionamiento de los colectores entre El Condado y Entrago, adjudicado por algo más de 900.000 euros y un plazo de ejecución de 22 meses. El saneamiento, por lo tanto, estará completo en 2020.

Gijón Este. La instalación, que incluye la planta de pretratamiento de La Plantona, es una de las que está provocando que España tenga que afrontar sanciones millonarias. El trámite ambiental para construir una depuradora subterránea en esa misma zona (El Pisón, en Somió) recibió 21 alegaciones, que ya han sido contestadas. El expediente está en la actualidad en manos de la Dirección General del Agua, que debe pasarlo en breve a la de Biodiversidad, encargada de la declaración de impacto ambiental. Vecinos de la zona exigen desde hace años la clausura de La Plantona y ya han anunciado que pleitearán en los tribunales también contra la nueva planta, al considerar que se situará a menos distancia de las viviendas de lo que exige la ley.

Gijón Oeste. La depuradora de La Reguerona tiene pendiente una actuación de mejora de las instalaciones para dar resultados favorables a las aguas tratadas y cumplir las exigencias de la directiva europea. El Estado, titular de la infraestructura, prevé una inversión de 24,7 millones: un colector industrial que empezará a funcionar este verano.

Las Caldas (Oviedo). La depuradora, ejecutada por el Estado, funciona y cumple las normas europeas. Está pendiente la red de colectores entre Argame y Soto de Ribera, también de competencia estatal, que costará 6 millones. Asimismo está pendiente la red de saneamiento de la cuenca del río Morcín, que ejecuta el Principado, costará 4 millones y estará lista en 2020. La conexión de Argame y el entorno de Alfilorios está también pendiente.

Llanes. Los trabajos de ampliación y renovación de la depuradora de la capital del concejo terminaron en 2014, tras una inversión de 6,89 millones. Aquella obra permitió incluir el tratamiento biológico como parte del proceso de depuración. Pero se han registrado vertidos sin depurar en las inmediaciones de la playa de El Sablón, en la capital del concejo. Existe un problema de exceso de caudal sobre el del diseño. Los alivios son muy frecuentes y se realizan en la zona trasera del paseo de San Pedro sin ningún tipo de tratamiento.

Luarca. La depuradora de la capital valdesana funciona correctamente y cumple los parámetros que establece la normativa europea, aunque está pendiente desarrollar la red de colectores desde Sabugo hasta Luarca. El saneamiento de Valdés-Busto costará 14,8 millones. Ambas inversiones son competencia del Estado. Por parte del Principado está pendiente la red de saneamiento en Busto y Chano de Canero, con proyectos ya redactados. El primero estará listo este año, mientras que el segundo precisa que antes el Estado ejecute el colector Valdés-Busto. La actual red de colectores alcanza al 60 por ciento de la población. Queda pendiente el saneamiento de Otur a Sabudo, el tramo hasta Canero y el saneamiento de Trevías.

Nora-Noreña. La depuradora de Villapérez fue objeto de una ampliación que costó 26 millones, pero no se está aprovechando y hay problemas de capacidad en el colector de la zona de La Corredoria y en otros tramos, lo que provoca alivios muy frecuentes al río Nora. Está pendiente la terminación de los colectores de Siero y Sariego, que costarán 7,8 millones y estarán listos en octubre de 2020.

Panes (Peñamellera Baja). La depuradora y el colector principal funcionan desde 2017 y cumplen las exigencias de la directiva europea, según el Principado.

Ría de Navia. La red de colectores principales y la depuradora están ejecutadas, tras una inversión de 6,93 millones. Empezarán a funcionar en marzo. Están pendientes los colectores de Anleo, Puerto de Vega y Villapedre.

Ribadesella. Aún no se han resuelto por completo los problemas por infiltraciones de agua marina en el paseo marítimo y el entorno de la cueva de Tito Bustillo. La inversión realizada, de 260.000 euros, ha mejorado la situación. El proyecto de ampliación del bombeo de Sebreñu, pendiente, costará 55.000 euros, y el colector de Cuerres 16,6 millones.

Río Esqueiro. El tratamiento de aguas residuales está en funcionamiento desde 2014, con resultados de depuración favorables, según un informe del Principado.

Sella-Piloña. La depuradora construida en las inmediaciones de Arriondas funciona correctamente y cumple las exigencias comunitarias. Está pendiente incorporar los vertidos de la zona de Bimenes, obra que implicará un gasto de 2,8 millones y concluirá en 2020. El Principado ha instalado una depuradora provisional, que costó 317.000 euros, para depurar las aguas de Bimenes hasta que funcione el colector definitivo. Está pendiente el tramo de saneamiento de Mestas, en el río Güeña.

Valle de San Jorge (Llanes). La depuradora funciona desde 2014, pero le llega muy poco caudal, pues está pendiente realizar varias conexiones y desarrollar la red de alcantarillado. Está pendiente la segunda fase del proyecto, que permitirá instalar colectores en los pueblos de la parroquia de Pría (Belmonte, Garaña, Llames, La Pesa, Piñeres, Silviella y Villanueva). El 90 por ciento de la población del valle tiene saneamiento, según el Principado, que pretende que la obra pendiente sea declarada de interés general para que sea financiada por el Estado.

Villabona (Llanera). El Principado recibió la depuradora el 30 de julio pasado, pero la puesta en servicio real no llegará hasta el mes de marzo. El gasto global asciende a 3,7 millones. Están pendientes el proyecto de colectores que alcanza hasta La Miranda y los colectores de Bello.

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