La red autonómica de carreteras está "muy deteriorada", tiene "grandes necesidades" y requiere "mayores dotaciones presupuestarias", admitió ayer el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, durante su comparecencia ante la comisión de esa área para responder a una pregunta urgente del diputado de Podemos Andrés Fernández Vilanova, sobre la situación de la AS -29, que une Cangas del Narcea e Ibias, y que está afectada por dos argayos. Lastra desveló que se están realizando estudios geológicos de los taludes de la vía, con la colaboración de la Universidad de Oviedo.

El túnel del Rañadoiro, en la AS-15, no sufre ningún daño estructural, fue otra de las afirmaciones de Lastra, al responder, también a Podemos, una pregunta sobre la obra de la carretera de Cornellana al puerto de Cerredo. El túnel está en obras desde diciembre por el desprendimiento del revestimiento de la bóveda.

Lastra defendió la "rapidez" y la "eficacia" de la respuesta del Gobierno ante las emergencias, que durante el temporal de enero afectaron a 203 carreteras autonómicas. Desveló que su departamento ha invertido en mejora de carreteras en el Suroccidente 13,5 millones: 4,7 en Tineo, 3,2 en Cangas del Narcea, 2,4 en Allande, 1,7 en Ibias y 1,3 en Degaña.

Podemos preguntó por la mejora de la AS-225, que une Pravia y Salas, cuyo estado calificó de "penoso" y "peligroso". Lastra desveló que el proyecto, ya redactado, está en fase de supervisión, lo que permitirá su aprobación este mes. La obra afectará a un tramo de 7,36 kilómetros, se licitará en 6,66 millones y durará 24 meses. Pero la licitación no llegará antes de siete meses, porque la ley obliga a acometer antes las expropiaciones.

El saneamiento de Carreña de Cabrales fue motivo de otra pregunta, en este caso de la diputada de Foro Patricia García Villanueva. Lastra resaltó que la capital cabraliega tiene red de saneamiento, pero no depuración. Su departamento presentó en enero un proyecto por valor de 750.000 euros a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, pero esta exige cambios por cuestiones ambientales. El Principado modificará el proyecto con la idea de incluirlo en los presupuestos de 2020 y 2021.