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Una auditoría de 2015 en Hunosa cuestionó gastos de Mallada por 18.000 euros

"El informe pasó todos los filtros y no hubo nada irregular", afirma la aspirante al Principado

Teresa Mallada, ayer, en LA NUEVA ESPAÑA, ante el informe de la auditoría de Hunosa de 2015. LUISMA MURIAS

Una auditoría del año 2015 puso en cuestión gastos que suman más de 18.000 euros puso en cuestión gastos que suman más de 18.000 euros realizados en la etapa de Teresa Mallada como presidenta de Hunosa (empresa con un presupuesto 200 millones). Las especulaciones sobre el contenido del documento han agitado los mentideros políticos de Asturias en las últimas semanas, tanto en el PP como en otros partidos, una vez que Mallada fue designada candidata popular a la presidencia del Principado. LA NUEVA ESPAÑA consiguió ayer el informe interno realizado a instancias de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y se puso en contacto con Teresa Mallada para confrontarlo. Ella aseguró que las explicaciones ya las realizó en sus alegaciones al informe provisional de auditoría, en los primeros meses de 2016. "Este informe ha pasado todos los filtros, no hay nada irregular", declaró la candidata popular que denuncia "una campaña de desprestigio" contra ella. "A los hechos me remito", afirmó, tajante.

La auditoría interna de la SEPI, fechada en diciembre de 2015, se centra en analizar "gastos sin soporte contractual". Llama la atención sobre los pagos de dos máster realizados por Teresa Mallada, el dinero destinado a "anticipos viaje de Presidencia" y el pago de restaurantes. El auditor señala que entre esas facturas, por un importe global de 7.851 euros, las hay de "riesgo muy alto" y "riesgo alto" para abonar productos de joyería; camisetas y ropa para bebé; quitaesmalte; infusiones; chicles; comidas en la cafetería de Hunosa y en restaurantes de comida rápida; artículos electrónicos; bebidas y compras en supermercados y pastelerías, entre otros. A la vista de esos datos, el auditor decidió ampliar la muestra a los ejercicios de 2012 y 2013 donde calificó "de nuevo" gastos de riesgo muy alto y alto por otros 4.226 euros, en los que hace hincapié en facturas para "la compra de marisco" (316 euros), compras en supermercado, chicles y comidas en la cafetería de la empresa. Además, señaló que la transferencia para pagar dos másteres de la presidenta, por un importe de 6.988 euros, no tenía "la oportuna conformidad".

El informe provisional del auditor de la SEPI fue objeto en febrero de 2016 de un informe de alegaciones de la presidencia de Hunosa. Teresa Mallada explicó a LA NUEVA ESPAÑA que en ellas se respondía a todas las dudas planteadas por el auditor.

"Ese informe no quedó encerrado en un cajón, Pasó todos los filtros internos y ha estado a disposición de los tres presidentes que ha habido en la SEPI desde ese momento (dos del PP y uno del PSOE)", argumentó ayer Teresa Mallada quien añadió que gran parte de los gastos que salen en dicha auditoría fueron realizados a instancias de la jefa de Protocolo de Hunosa en aquella época, "una persona de la máxima confianza de la presidenta del PP, Mercedes Fernández, y tesorera del partido en Asturias".

La auditoría elaborada hace 4 años ha sido arma en la batalla interna de los populares. Mercedes Fernández la puso sobre la mesa en Génova en la reunión en la que la dirección nacional del partido eligió a Mallada como candidata autonómica con el fin de desbancarla. Más motivos para la guerra: la candidata se opuso a una coalición con Foro en las elecciones generales, a la que sí eran favorables Fernández y el partido que promovió Francisco Álvarez-Cascos. Es ahora cuando aflora este documento, en un contexto de fuego supuestamente amigo para que tire la toalla.

El pago de los dos máster. Hunosa abonó 6.068 euros por un máster en dirección de empresas y otros 920 por un máster en prevención de riesgos laborales. La objeción del auditor estriba en que esa trasferencia no tenía "la oportuna conformidad" ni la aprobación previa del gasto. Tanto el entonces director económico financiero como el de Recursos Humanos de Hunosa justificaron esos pagos, tal y como está acreditado en las alegaciones. Hunosa tiene un plan de formación para su plantilla y también para sus titulados superiores. Mallada tenía "plena cobertura" para hacer esos máster y desde su entorno también aseguraron ayer que al ser on line y a distancia, para poder compatibilizar esa formación con su labor en la presidencia, "fueron más baratos" que los que hizo otro personal de la empresa minera que también recibió formación específica, una práctica habitual y promovida desde la SEPI, añadieron.

"Marisco para llevar". El auditor señala entre las facturas de riesgo muy elevado una de 316,01 euros con el epígrafe "marisco para llevar". En las alegaciones presentadas por Hunosa se recoge que fue una atención con la presidencia de la SEPI. Ese marisco se incorporó a un catering para una reunión que hubo en Madrid a la que asistieron el presidente de la SEPI, Ramón Aguirre y otros directores de esa sociedad estatal. "Fue un asunto que llevó la jefa de Protocolo", precisó Mallada.

7.100 euros en gastos de restaurante. El auditor señala entre las facturas de riesgo alto un importe de 7.100 euros por facturas relativas a "comidas en la cafetería de Hunosa, comidas a domicilio, bocadillos, tickets en restaurantes de comida rápida, consumiciones consistentes únicamente en bebidas... en las que no se identifica ni el motivo, ni los asistentes ni la necesidad de las mismas". Aunque estos pagos están en el epígrafe "Anticipos de viaje de la Presidencia", desde el entorno de Mallada aseguran que no fueron comidas de la presidenta sino abonos de consumiciones realizadas con motivo de reuniones de comités intercentro y similares, de ahí que las factura procedan de la cafetería de Hunosa o de bares cercanos. "Cuando llegue a Hunosa suspendí las comidas que anteriormente tenían lugar tras los Consejos de Administración" en un céntrico restaurante de Oviedo, precisó Mallada a LA NUEVA ESPAÑA ayer. Las facturas de caramelos y chicles, de riesgo muy alto, eran para las diferentes salas y estancias de la sede central de la empresa.

El quitaesmalte para la impresora. Entre los gastos de riesgo muy alto el auditor interno de la SEPI señala la compra de quitaesmalte. En el documento de alegaciones presentado por Hunosa se explica el motivo de esa factura, por un importe de 1,9 euros. "Es la única compra de quitaesmalte realizada en 4 años para la limpieza del cristal de la fotocopiadora".

Gastos en joyería y ropa de bebé. El informe refleja facturas de "joyería", de ropa de bebé y de ropa. En las alegaciones de 2016, Hunosa aclaró que un cargo de 39,55 euros de joyería fue para "un detalle por el nacimiento de la hija de la secretaria del presidente de la Sepi" mientras otro, de 19,74 euros, fue para poner una placa de latón en el cuadro del expresidente Juan Ramón García Secades. Otro cargo, de 69,9, fue para un detalle (ropa) por el nacimiento del hijo de la directora de Carbunión.

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