El número de beneficiarios de los viajes del Imserso que llegan a Asturias son muy limitados y con apenas impacto en el sector y en la economía regional. Una situación que los empresarios del ramo se están empezando a plantear como un nicho de negocio al que se podría optar.
El Principado correspondería, en principio, a los circuitos culturales, según explicó Íñigo Fernández, presidente de la Asociación de operadores turísticos y agencias de viajes (Otava) en Asturias. "En comparación con la demanda que tienen las islas y la costa mediterránea y andaluza, estos viajes son marginales", afirmó. Pero aún así, allí donde llegan ayudan a mantener decenas de empleos en el sector turístico.
"Se ve claramente en el Aeropuerto de Asturias. Los vuelos del Imserso ayudan a mantener la actividad y el empleo fuera de la temporada estival. Y lo mismo ocurre en las compañías aéreas. Son miles los asturianos que viajan en avión y eso también tiene su repercusión", explicó Íñigo Fernández.
Fuentes empresariales indicaron que "Asturias tiene que abrir nuevas vías de negocio e innovar. Quizás optar a recibir viajeros del Imserso sería una opción que se debería de estudiar, porque ayudarían a mantener abiertos hoteles que ahora cierran todo el invierno y eso son muchos puestos de trabajo".