Koldo Osoro, gerente del Serida entre 2009 y 2015, se sienta en el banquillo de la sección tercera de la Audiencia Provincial a partir del próximo 20 de mayo, y hasta el día 30, para responder de un delito de malversación de caudales públicos. Un jurado decidirá sobre este caso, del que se ocupó largo y tendido la Junta del Principado y la Sindicatura. Según la acusación, utilizó medios del Serida para su empresa de ganado Prodexcal. El ministerio público solicita para el exgerente cuatro años y medio de prisión, así como quince años de inhabilitación para cargo público. Otros tres empleados del Serida, José Manuel Méndez, Arsenio Álvarez y Urcesino García, se enfrentan penas que suman once años de prisión.

Según la acusación, "en la finca EL Carbayal que el Serida tiene Illano, de unas 250 hectáreas, Koldo Osorio regentó una explotación ganadera, de la que se beneficiaron tanto él como una cooperativa, empresas y personal que trabaja en el mismo Serida. La mecánica comisiva consistía en que de la extensa ganadería de diversas especies que existe en la finca de Illano, se vendía una pequeña parte oficialmente por el Serida, y otra parte mucho mayor a título particular por Koldo Osoro,en beneficio propio y de terceros a través de una cooperativa privada".

Añade la acusación que "los animales de la cooperativa se habrían estabulado, alimentado y criado en las instalaciones del Serida y a costa de dinero público. Esto era posible porque en la finca coexisten cientos de cabezas de cabras, ovejas y vacas y menos de cerdos con una gestión que impide cuantificar e identificar adecuadamente los animales nacidos en el rebaño. Ello era particularmente fácil en el caso de las cabras y ovejas porque no es necesaria su identificación mediante crotal hasta que tienen 6 meses de vida y son frecuentes los partos de gemelos. Esa falta de constancia en un registro oficial que permitierasu control facilitaba su desvío y enajenación al margen del Serida y por ende, de la administración".

Según el ministerio público, Prodexcal dispuso de una finca que no le fue cedida por el bando de tierras, de forma que la cooperativa no tenía terreno físico donde estabular y criar el ganado. "No obstante lo anterior, Prodexcal continuó domiciliada en El Carbayal de Illano, finca que declaraba como pasto permanente en la solicitud de las ayudas comunitarias que percibió entre los años 2005 a 2010", señala la acusación.

Además, "no hay convenio o acuerdo de colaboración suscrito entre el Serida y Prodexcal, que no tiene la condición de entidad colaboradora de los proyectos de aquél en esa época. Si bien constan proyectos puntuales en momentos determinados con el Área de investigación del Serida, no coinciden en las fechas o en el objeto con las ventas de ganado realizadas por Prodexcal, no tratándose de una colaboración genérica propiamente dicha".

Y también "Prodexcal se benefició de los medios del Serida para criar y engordar el ganado a su costa, utilizando la finca de El Carbayal como si fuese propia a todos los efectos. La cooperativa utilizaba el pienso del Serida y las instalaciones de esta entidad en Illano, y el ganado era transportado para su venta por José Manuel Méndez en un camión adquirido por el Serida, firmando Koldo Osoro como veterinario habilitado de Prodexcal".

La defensa de Osoro aduce una venganza profesional y política como base de la denuncia que ha conducido a este juicio. El fiscal pide una indemnización para el Principado de 49.274,71 euros, a pagar solidariamente por los cuatro acusados, y otros 178.916,72 a pagar exclusivamente por Koldo Osoro por las cantidades indebidamente pagadas por el proyecto Mayor Favor.