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ADELE DIAMOND | Neurocientífica

"Exigimos que los niños sean pequeños universitarios, cada vez más temprano"

"Pensamos que la escuela debe ser seria, pero se aprende más estando alegre"

Adele Diamond, ayer, en el Colegio de Médicos de Oviedo. IRMA COLLÍN

La neurocientífica neoyorquina Adele Diamond revolucionó hace unos años el estudio del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y ahora está embarcada en una cruzada por una escuela que fomente la creatividad a través del juego, la actividad física y el hacer, como una forma de desarrollar el autocontrol, la memoria y la atención. Asegura que parte de los problemas de los menores se deben al estrés. "Exigimos que sean pequeños universitarios", asegura. Pero también a un exceso de tecnología. "Que los profesores hagan menos y las máquinas más es una mala idea", sostiene. Ayer participó en la Jornada de Neurociencia y Educación, organizada por Educ@ction y celebrada en el Colegio de Médicos de Oviedo.

- ¿Por qué los niños tienen ahora sus funciones ejecutivas (autocontrol, memoria y atención) menos desarrolladas que los de hace unas décadas?

-No lo sabemos, pero hay algunas hipótesis. Una de ellas es que los niños pasan menos tiempo fuera, físicamente activos, en la naturaleza, interactuando con amigos, negociando a qué jugar, bajo qué reglas, y quizá pasando demasiado tiempo con computadoras y tecnología. Otra posibilidad es que tengan más estrés.

- ¿Una nueva escuela?

-Sí. Los niños necesitan estar activos con las manos para aprender habilidades. Tú no aprendes escuchando, sino haciendo. Por otro lado, el estrés impide las funciones ejecutivas y, de muchas maneras, la escuela es innecesariamente estresante. Avergonzar a un niño nunca es necesario, motiva que abandone. La realimentación positiva siempre da mejores resultados. Sabemos que la crítica y el castigo no dan resultado, pero seguimos haciéndolo.

- Perpetúa la falta de capacidades.

-No sólo las perpetúa, las crea. Lo hacemos mejor cuando estamos alegres. Aprendemos más, funcionamos mejor. No hay ninguna razón por la que la escuela no pueda ser divertida. Desgraciadamente, pensamos que la escuela debe ser algo serio.

- Usted centra ahora su investigación en los beneficios de actividades como la danza o la música. ¿Qué aportan?

-Requieren funciones ejecutivas. Tienes que recordar los pasos, adaptarte de forma flexible a lo que tus compañeros te requieren. Si tocas en una orquesta, tienes que coordinarte, prestar atención a los demás instrumentos. Y además disfrutas, estás alimentando la parte social y también usando el cuerpo. Estás haciendo todas las cosas en las que se apoyan las funciones ejecutivas.

- La escuela actual, ¿más preocupada por qué se enseña que en enseñar a aprender?

-Desde luego. Se focalizan en el contenido, y los exámenes no se centran en las funciones ejecutivas, en la creatividad para resolver problemas, en el razonamiento, sino en recordar detalles, hechos, que es lo más fácil de testar. Se centran demasiado en el contenido, y muy poco en los procesos de pensamiento.

- ¿Habría que retrasar, como hacen los finlandeses, hasta los siete, el inicio de la escuela?

-Estoy a favor de la educación temprana, no de la instrucción académica temprana. Esa educación temprana debe ser juego, trabajar con las manos, con los materiales. No hay problema en introducir la lectura, el problema es exigir que sean capaces de leer de forma temprana. Los niños se desarrollan en diferentes grados y un niño de cinco años quizá no sea aún capaz, biológicamente, de leer, y necesite otro año o dos. Pero si a esa edad les decimos que tienen que leer, algunos fallarán, se sentirán fracasados, odiarán la escuela y su concepto de ellos mismos sufrirá muchos años. Por tanto, si en preescolar se mantiene el lenguaje oral, incluso en el primer curso de primaria, al final del segundo curso habrá mejores lectores que si se fuerza a los niños a leer ya con cinco años.

- ¿Hay aprendizaje sin emoción?

-Necesitas estar motivado, interesado, tiene que haber una conexión emocional. Aprendes muy poco si no estás interesado.

- ¿Cuándo deberían aprender idiomas los niños?

-Lo más temprano posible, y lenguaje oral, no lectura o gramática. Hay un estudio con niños húngaros de padres bilingües. A los siete meses de edad, los menores ya tenían un input bilingüe y mejores funciones ejecutivas.

- Ha estudiado el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Parece que cada vez hay más casos.

-Sí y no. El estrés puede hacer que parezca que tienes TDAH, porque estás muy distraído. En parte creo que el TDAH está sobrediagnosticado. En Estados Unidos, se dice que un cuarto de los niños diagnosticados con TDAH sufren en realidad apnea del sueño. Pero también es que estamos exigiendo de los niños que se comporten como pequeños universitarios, cada vez más temprano. Ahora decimos que el niño que no puede estar sentado durante un largo periodo de tiempo es que tiene TDAH. Estamos exigiendo demasiado a los niños. Así que no sabemos si el TDAH está al alza, o son los requerimientos a los niños los que hacen que parezca que lo sufren.

- Hay una explosión de sistemas alternativos de educación. ¿Cuánto hay de fraude?

-Hay algunas malas alternativas, como las que enfatizan la tecnología. Que los profesores hagan menos y las máquinas más creo que es una mala idea. Yo soy una gran fan del método Montessori. España fue el primer país en introducirlo y entonces Franco se deshizo de él, y ahora está volviendo a aparecer aquí. Montessori permite a los niños hacer, nunca los avergüenza. Si un niño comete un error, no se le reconviene, sino que se le vuelve a decir cómo se hace. Permite que los niños conecten con sus pasiones. Incluso hay niños que enseñan a otros niños, porque aprenden más de uno como ellos que de los adultos.

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