Adrián Barbón, el candidato el PSOE a la Presidencia del Principado, ha visitado esta mañana lo qué el mismo definió como "el corazón industrial de Asturias" (el puerto de Avilés, punto neurálgico de la logística de transporte de fábricas como Asturiana de Zinc, Alcoa, Arcelor y Fertiberia, entre otras) y valoró el esfuerzo inversor que estas y otras compañías han realizado para conjugar la actividad industrial con la calidad del aire, en alusión directa a la reducción de los índices de contaminación lograda en el entorno portuario avilesino después de un gasto de más de 10 millones de euros en medidas de control de la polución. "Esto demuestra que la actividad industrial y el respeto al medio ambiente son compatibles y conciliables si un gobierno, como ha sido el caso del socialista, desarrolla el marco adecuado, que en el caso del Puerto de Avilés ha sido la comisión de seguimiento de la contaminación", ha resaltado Barbón.

El candidato ha reseñado que el PSOE "es el único partido que concurre a las elecciones que tiene un plan industrial para Asturias" y opuso a esa afirmación que "el cuarteto de la derecha ni está en política industrial ni se le espera; es un sector del que todo le es ajeno". Frente a esto, Barbón asegura que "los socialistas tenemos dos ventajas de los que otros carecen: estabilidad para formar un gobierno fiable y capacidad de influencia en Madrid para que los problemas de la industria asturiana se pongan sobre la mesa y se resuelvan".

Al respecto de esa "influencia en Madrid", Barbón pide el voto para el PSOE al objeto de mantenerla, a diferencia de lo que planteó ayer el presidente nacional del PP, Pablo Casado, de campaña por Asturias. El líder popular pide el voto para su formación para generar "contrapesos territoriales" que frenen las políticas socialistas; Barbón ha replicado: "Casado evidencia que es un perdedor con estos puntos de vista. Lo que Asturias necesita es sintonía política para influir en Madrid y capacidad para generar sinergias que impulsen los proyectos de la región, precisamente de lo que pide Casado, que parece no aprender la lección y se empeña en ser castigado".

Adrián Barbón ha expuesto como ejemplo del "compromiso" de su partido con la industria y del "poder de influencia" sobre el Gobierno de Sánchez la elevación de 90 a 200 millones del fondo económico previsto para ayudar a las empresas electrointensivas (como Alcoa, Arcelor y Azsa) a mejorar su competitividad energética o el desarrollo del Estatuto de los Consumidores Electrointensivos, una herramienta aún pendiente de entrar en vigor que tiene por objeto propiciar condiciones que eviten, por ejemplo, el anunciado cierre de la fábrica de la aluminera Alcoa en Avilés.

Preguntado por las críticas que le dirigió la candidata del PP a la Presidencia del Principado, Teresa Mallada, por su "frivolidad" con respecto a la cuestión de la oficialidad del bable, Barbón esquivó la cuestión: "Lo que le pasa a la señora Mallada es que como no tiene programa y casi ni partido busca sacar temas a la palestra para distraer la atención".

De bable no quería hablar el candidato socialista, pero sobre el supuesto deseo de los partidos de derecha para que el índice de participación en las elecciones del domingo 26 sea bajo sí que se ha prodigado: "La derecha arrienda la ganancia del 26M a que la gente no vaya a votar, confiando así en que eso les favorezca para sus políticas de pactos. Ya es bien triste este planteamiento. Desde luego, en el PSOE lo que queremos es que se vote, nosotros estamos en la clave de gobernar, de ningún modo en estrategias de pactos para llegar al poder. Queremos gobernar para seguir aplicando las políticas que arreglan los problemas de Asturias y para evitar que en esta región veamos algún día recetas 'a la andaluza' como las que ya anuncia el candidato asturiano de Vox, en concreto la confección de listas negras de funcionarios que trabajan en el ámbito de la violencia de género".