Los alumnos de quinto de primaria del colegio público Celestino Montoto de Pola de Siero y los profesores que les acompañaban se llevaron un buen susto cuando regresaban a casa, el viernes, de un campamento de inmersión lingüística de inglés en Ledesma (Salamanca). La Guardia Civil dio el alto al conductor del autobús por circular bajo los efectos de las drogas en Zamora, después de que uno de los maestros diera la voz de alarma.

El docente se percató de un comportamiento extraño en el hombre. Por ejemplo, le hizo desconfiar su brusca conducción. Así que le mandó parar y avisó a los agentes para que tomaran cartas en el asunto. Así que la Guardia Civil de Tráfico les paró a la altura del pueblo zamorano de Cubo de Tierra del Vino, que está próximo al límite con Salamanca. Le realizaron el test de drogas al chófer y se confirmaron las sospechas del profesor. El conductor dio positivo en dos tipos de sustancias -una de ellas, cocaína- y fue detenido.

La empresa de autobuses, que lamenta lo ocurrido, actuó con premura para que los 42 niños pudieran proseguir el viaje con un nuevo conductor. El chófer había tenido hasta la fecha una correcta e intachable conducta laboral y gozaba de una alta valoración dentro de la plantilla de la empresa.

Como lo primordial era garantizar la seguridad de los menores, fueron evacuados del autobús y, una vez fuera, siguieron toda la operación con gran expectación. Tienen entre diez y once años. La dirección del centro informó ayer a los padres de lo ocurrido en una reunión, pues el suceso ha causado gran revuelo en la Pola. Los padres guardan gran hermetismo sobre el asunto y no han querido pronunciarse sobre lo ocurrido. Solo insisten que "los niños están bien?.