Un hombre de 23 años, resultó ileso tras ser recatado por el Grupo de Rescate de Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), después de precipitarse de unos 30 metros, cuando realizaba la ruta del Cares, en la zona de la canal de Sabugo, en Cabrales.

El Centro de Coordinación de Emergencias del 112 Asturias recibió varios avisos, el primero a las 15.02 horas. En las llamadas indicaban que estaban escuchando a una persona pedir ayuda, pero no lograban localizarlo. No la veían. Unos decían que las voces procedían por encima de la senda y otras personas las ubicaban frente a la canal de Culiembro, al otro lado del río en una zona arbolada, por la canal que sube a Amuesa.

La Sala 112 del SEPA moviliza el helicóptero medicalizado de Bomberos de Asturias y al Grupo de Rescate del que forma parte un médico-rescatador.Tras llegar a la zona, el helicóptero realiza varios vuelos para intentar localizar al afectado, sin éxito. Uno de los bomberos-rescatadores toma tierra y se entrevista con numerosas personas que están realizando la ruta. Una de ellas, con un prismático, cree que ha localizado al afectado.

A las 17.30 horas informan que han localizado al afectado. Esta enriscado y prácticamente colgando de un árbol en una pared de gran verticalidad. Van a proceder a evacuarlo con la grúa del helicóptero.

La operación resulta muy compleja no sólo porque el senderista se encuentra en mitad de la pared y metido entre las ramas de un árbol sino porque hay viento desfavorable de cola. Tras acceder uno de los bomberos-rescatadores hasta él, le coloca el triángulo de rescate y lo evacúan a la aeronave con una grúa en la que se desplegaron 30 metros de cable.

El afectado, según la médica-rescatadora, estaba ileso y sólo presentaba algunos rasguños por lo que lo trasladaron hasta Poncebos, localidad en la que había dejado estacionado su vehículo.