Quedan aún dos semanas de verano, pero a Asturias parece haber llegado el otoño... O el invierno. Esta noche llegarán los chubascos y para mañana se esperan más, e incluso nieve en la Cordillera. El ala oriental de la región estará en alerta amarilla (fenómenos meteorológicos habituales pero potencialmente peligrosos) por fuertes lluvias, que serán generalizadas en todo el Principado y que podrán ir acompañadas de tormenta. La Agencia Estatal de Meteorología no descarta que las precipitaciones se produzcan en forma de nieve en las cumbres de la Cordillera Cantábrica. El temporal vendrá acompañado además de una bajada de temperaturas de hasta seis grados. Oviedo se quedará con una máxima de 17, Gijón, de 21 y Cangas del Narcea, de 16.

El causante de esta inestabilidad es la entrada de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) por el Cantábrico oriental, que se desplazará a lo largo de mañana hacia el Mediterráneo, donde se producirán los chubascos más intensos del país. Una DANA es "una depresión cerrada en altura que se ha aislado y separado completamente de la circulación asociada al chorro, y que se mueve independientemente de tal flujo", según la definición de la Aemet. En resumen, es una gota fría o borrasca que se descuelga del resto y que pasará por el Principado. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología, mañana estará nuboso o cubierto con lluvias y chubascos generalizados y persistentes que ocasionalmente pueden ir con tormentas, y serán localmente fuertes en la mitad este.

Suben las temperaturas el fin de semana

Pero por suerte sólo será un paréntesis invernal. El miércoles habrá lluvias débiles, que tenderán a remitir por la tarde. Y el jueves ya vuelve el sol y suben las temperaturas (al menos las máximas). Aunque la previsión puede variar, el fin de semana será veraniego con temperaturas que podrían rozar los 30 grados.