Los dos acusados por protagonizar una alocada oleada de robos en Llanera y Siero, entre septiembre y noviembre de 2017, aceptaron ayer unas condenas que suman once años de prisión por un total de trece robos. Uno de ellos, además, se declaró culpable de haber intentado atropellar a un guardia civil que intentó detenerle. La carrera desquiciada que protagonizaron, asaltando gasolineras, garajes y otros establecimientos, robando coches y quemando incluso uno de ellos para borrar sus huellas, se debió al parecer a la dependencia de la cocaína de ambos, aunque uno de ellos no pudo demostrarla en el juicio.

El fiscal Enrique Valdés-Solís aplicó la atenuante de drogadicción solo en el caso de uno de los acusados, el ovetense J. L. M. M., debido a que en el momento de los hechos "presentaba una fuerte dependencia de la cocaína que limitaba su capacidad de actuación".

Este acusado aceptó tres años y medio de cárcel por un delito continuado de robo con fuerza, 65 días de trabajos en beneficio de la comunidad por haberse llevado tres vehículos, tres meses de prisión por daños, un año y nueve meses por el delito de atentado, otros seis meses por conducción temeraria -así como tres años sin carné de conducir- y otros 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad por circular sin el correspondiente permiso de conductor, que se la había retirado tres años antes de los hechos. En total, seis años de prisión.

Al otro acusado, B. J. S. P., vecino de Siero, el Juzgado de lo penal le impone cuatro años y tres meses de cárcel por robo continuado, otros 65 días de trabajos en beneficio de la comunidad por haber cogido tres vehículos y otro año de cárcel por los daños en el vehículo que quemaron. En total, cinco años y tres meses de prisión. Los dos acusados están ingresados en la cárcel de Villabona.