Las vegas de Panes, Abándames y El Mazu desaparecieron ayer bajo el agua. Los ganaderos tuvieron que sacar a los animales en plena noche. El deshielo en los Picos de Europa y las fuertes lluvias propiciaron que el río Deva se desbordara a su paso por Peñamellera Baja, e incluso llegó a cortarse la carretera AS-343. El alcalde, José Manuel Fernández Díaz, recordó a Confederación Hidrográfica la necesidad de dragar entre Panes y Siejo parte del caudal. "Es algo que se venía haciendo de forma anual hasta que hace tres años dejó de hacerse" y comenzaron los problemas, lamentó el regidor. E. S. R.