Guerra sin cuartel en el seno de Foro entre sus dos "pesos pesados", el que fuera presidente del Principado, Francisco Álvarez-Cascos y la exalcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón. La actual presidenta forista sostuvo ayer que la dimisión de Cascos como vicepresidente "llega tarde y mal" y le achacó los resultados negativos que ha cosechado Foro desde que decidió repetir las elecciones autonómicas en 2012, nueve meses después de derrotar al PSOE.

Carmen Moriyón convocó una comisión directiva en la que leyó una carta de respuesta a Cascos (que no acudió), acto que repitió en una comparecencia ante los medios, de los que no admitió preguntas. La presidenta de Foro no se anduvo con paños calientes. Atribuyó al veterano político la responsabilidad de la campaña electoral "equivocada" de las autonómicas y municipales y afirmó que Cascos, tras ausentarse durante todo el verano, solo regresó "para intentar tomar el control del partido", cuando Foro logró la constitución del grupo parlamentario en la Junta y "con la consecuente aportación económica al partido que ello conlleva". Unas palabras con las que Moriyón ponía el foco sobre los dineros del partido, una línea argumental en la que insistiría cuando explicó que una de las razones por las que sigue como presidenta de Foro es "para velar por el cumplimiento íntegro del pago" a los proveedores de esa campaña electoral, "que en estos momentos asciende a 300.000 euros", y también cuando subrayó que Cascos "no se limitó a estar, sino que quiso hacer e hizo. Siempre, eso sí, remuneradamente".

La cirujana dejó entrever que Cascos pretendía su dimisión al frente de Foro tras el mal resultado en los comicios autonómicos, una responsabilidad que, según dijo, asumió con la renuncia a recoger su acta de diputada. Moriyón aprovechó para hacer una enmienda de totalidad a la estrategia de Cascos, con autocrítica incluida, tras ganar las autonómicas de 2011. "Su tiempo político acabó cuando hizo fracasar el único gobierno que pudo suponer un cambio real en Asturias (...) Usted sabe muy bien que su carrera política quedó en entredicho cuando traicionó la confianza de 178.000 asturianos y asturianas convocando unas elecciones para perderlas ante el espejismo mesiánico al que, reconozco mi error, todos le aupamos", afirmó la exalcaldesa de Gijón, que habló de la existencia de "episodios desagradables" en la reciente campaña de las generales. También negó que en los nombramientos que ahora ha propuesto para la comisión directiva de Foro subyazca el fin de "cambiar la postura ideológica de Foro". Su mayor carga de profundidad llegó en los párrafos finales de la misiva: "Intenta fracturar un partido que ya ha sufrido bastante por su forma de hacer política, despreciando a quien discrepa con usted (...) Hay una lucha porque usted unilateralmente la ha desencadenado". Moriyón, por último, retó a Cascos a que "si quiere sustituir en su totalidad la comisión directiva que yo dirijo, lo haga por métodos estatutariamente previstos para ello y no, como ha hecho durante tantos años, mediante las artimañas de la vieja política".

Poco antes de que Moriyón compareciera ante los medios, Cascos divulgó un comunicado en el que tachó de "operación innoble" y "propaganda goebbeliana" atribuir sus "profundas discrepancias" a móviles económicos. Se trata, aseguró Cascos, de acusaciones de dirigentes de su partido que "buscan confundir y distraer la atención sobre cuestiones fundamentales". Argumentó que su renuncia a la vicepresidencia tiene como fin "recuperar la autonomía" como vocal de Foro para oponerse a que el partido sea "muleta del PSOE" y mantuvo que Foro es un partido "asturiano, autonomista y constitucional" y no "asturianista, regionalista o nacionalista". El diputado Pedro Leal calificó de "insólito" que la comisión directiva fuese "un discurso sin réplica de la Presidenta" y censuró "las descalificaciones" a Cascos.