El Servicio de Salud del Principado (Sespa) "no cumple los plazos en la mayoría de hospitales y patologías", denuncia la Plataforma por la Salud y la Sanidad Pública Asturias, que ha entregado a la Consejería de Salud del Principado un documento en el que hace balance del primer año de vigencia del decreto autonómico que establece un límite a los tiempos de espera en algunas prestaciones sanitarias.

Esta norma entró en vigor el 8 de noviembre de 2018 y fija tres topes. Por una parte, 60 días (dos meses) para colonoscopias, mamografías, ecografías, tacs y resonancias. También 60 días para consultas de Ginecología, Oftalmología, Traumatología, Dermatología, Otorrino, Neurología, Cirugía General, Urología, aparato digestivo y Cardiología. Y 180 días (seis meses) para intervenciones de cirugía cardiaca (valvular y coronaria), operaciones de cataratas, histerectomías e implantes de prótesis de cadera y rodilla.

El citado colectivo fundamenta sus quejas en casos concretos de citas de primeras consultas con "más de un año de demora" y también en la información oficial que ofrece la Administración sanitaria en la página web "AsturSalud". Pese a la proliferación de estas situaciones, solo 229 pacientes han solicitado, en lo que va de año, un "certificado de garantía" de su situación en lista de espera, según los datos facilitados por la Consejería de Salud. Este trámite constituye un paso necesario para formular una reclamación que obligue a la Administración a ofrecer una alternativa a esa espera excesiva. Y en algunos casos esa reclamación ni siquiera llega. A juicio de la Plataforma por la Salud y la Sanidad Pública Asturias, este proceso es "innecesariamente complicado" y la certificación "debería ser automática al entrar en la lista de espera".