Las obras de conservación del nudo de Serín en la "Y" se complican. El talud situado junto a la autovía en los primeros metros del ramal que conduce a Avilés amenaza con venirse abajo. Eso al menos advierten algunos conductores, tras comprobar el intenso movimiento de tierras registrado en la zona. El Ministerio de Fomento, por su lado, se limita a aportar los datos técnicos de una obra adjudicada el pasado mes de junio por 877.000 euros, pero no revela si el problema retrasará la finalización de los trabajos, que debería ocurrir, como máximo, el 3 de febrero del año que está a punto de comenzar.

"Se trata de las obras de conservación en ejecución en el nudo de Serín", que consisten en "el acondicionamiento y mejora del drenaje del talud colindante a la autopista, y posterior reconstrucción del firme, a fin de resolver la deformación existente en la rasante", explicó ayer Fomento.

El proyecto surgió tras observar el Ministerio levantamientos y rotura del pavimento de hormigón existente en esa zona de la "Y". La actuación proyectada consiste en la reconstrucción de la calzada derecha de la A-8, en una longitud de unos 160 metros, mejorando previamente el terreno bajo el pavimento dañado y rebajando el nivel freático mediante la construcción de unos pozos drenantes en el talud adyacente. Fue, precisamente, durante la construcción de esos pozos cuando el talud empezó a amenazar con venirse abajo y obligó a acometer una actuación extra.

En la zona donde se ejecutan las obras, la calzada derecha (la que se dirige a Avilés) cuenta con 3 carriles. Las obras comprenden la totalidad de esa calzada, pero Fomento anunció que se irán ejecutando "por mitades, estableciéndose los desvíos necesarios para que queden en todo momento dos carriles abiertos al tráfico, uno para el procedente de Oviedo (por la A-66) y otro para el de Gijón (por la A-8)".

La reconstrucción del firme en esa zona de la "Y" fue licitada el 26 de diciembre de 2018, por algo más de un millón de euros. Presentaron ofertas cuatro empresas, pero una fue desechada por temeraria. La adjudicación, el 10 de junio de este año, favoreció a la unión temporal de empresas Abaldo-Conciso. La formalización del contrató se cerró nueve días después, aunque fue objeto de rectificación el 2 de julio. El plazo de ejecución quedó establecido en siete meses.