Hoy recordamos aquel 3 de abril de 1979 en que los españoles acudieron a las urnas a elegir alcaldes y alcaldesas. Aquel día de hace cuarenta años en que tras una larga y oscura dictadura se sentaron las bases para la democracia local que hoy vivimos y celebramos.
Los nuevos alcaldes tomaron posesión de sus cargos el 19 de ese mes. Nombres emblemáticos como Enrique Tierno Galván, Julio Anguita o Narcís Serra llegaron a los ayuntamientos de Madrid, Córdoba y Barcelona. Ese 3 de abril de 1979 más de un centenar de mujeres llegaron también a las alcaldías.
Han pasado cuatro décadas y los ayuntamientos son uno de los pilares básicos del Estado de bienestar. Europa deber escuchar la voz local y deben tomarse medidas para afrontar el reto demográfico para prevenir la pérdida de población que sufre la mitad de los municipios de nuestro país. También se deben tomar acciones que lleven a la gente a vivir en sus pueblos, que cuestan dinero pero que fijan población. Hay que dedicar más recursos para la España despoblada.
Los alcaldes y alcaldesas debemos liderar esta reforma, es el reto estratégico para los próximos cuarenta años.
Gracias a los representantes del poder local por cuarenta años de servicio a la democracia.
