La nevada caída sobre Asturias y otras comunidades autónomas a mediados del pasado mes de noviembre ha salido cara, desde los puntos de vista emocional y económico, a una familia asturiana. El traslado de un enfermo terminal asturiano desde Madrid a Oviedo se vio interrumpido por el cierre de la autopista del Huerna. El sobrecoste derivado de esta maniobra, que asciende a casi 700 euros, deberá ser asumido por los familiares del enfermo, quien falleció pocos días después, ya en territorio asturiano. Ni la compañía aseguradora del paciente ni la empresa concesionaria de la autopista asturleonesa han querido asumir los gastos adicionales.
La secuencia comenzó el jueves 14 de noviembre. La esposa y los hijos de A. G. C. habían solicitado el alta voluntaria del enfermo, que estaba ingresado en el Hospital Sanchinarro, centro privado de Madrid. ¿Su argumento? Que el hombre, de 70 años, había entrado en fase terminal y tanto él como su familia deseaban "acercarse a casa", explica la viuda del enfermo.
El paciente tenía que ser trasladado en ambulancia, y así se hizo. Pero la nieve obligó a cerrar el Huerna. Con la vía cortada, la ambulancia no pudo avanzar, tuvo que dar media vuelta y llevó al paciente al Complejo Asistencial Universitario de León, donde llegó al filo de la medianoche y pernoctó. A la mañana siguiente, ya con la carretera abierta, por fin pudo llegar a su destino, el Centro Médico de Asturias, donde falleció tres días después, el lunes 18.
La empresa de ambulancias que realizó el traslado emitió una factura adicional de 270 euros por la maniobra de desvío a León. Y el hospital público leonés reclamó 408,74 euros. En total, 678,74 euros de los que no han querido hacerse cargo ni la aseguradora del paciente ni Aucalsa, concesionaria de la autopista que une Asturias y León atravesando la Cordillera Cantábrica.
¿Qué argumentos emplean unos y otros? La familia del paciente entiende que el temporal y el cierre de la autopista no son responsabilidades suyas, por lo que "el sobrecoste no debe recaer sobre nosotros". "Lo que hacemos es reclamar los gastos de un traslado necesario a las entidades que tenían que hacerse cargo de que se llevara a cabo sin contratiempos", argumenta la viuda del paciente.
Sin embargo, ni Asisa ni Aucalsa lo ven así. La empresa aseguradora aduce que la petición de la familia "no cumple los requisitos" prescritos en el capítulo sobre utilización de medios no concertados. Y matiza que el traslado se produjo porque el usuario y su familia solicitaron el alta voluntaria.
Entre tanto, la concesionaria de la autopista del Huerna ha denegado por dos veces la solicitud de reembolso de los gastos bajo el argumento de que, ante la previsión de nevadas, la Dirección General de Tráfico "hizo pública una nota de prensa advirtiendo a los conductores evitar circular por las carreteras de Asturias y León", y señalando que, en caso de tener que hacerlo, "las condiciones del viaje podrían verse afectadas por posibles actuaciones en la vía con el fin de garantizar la fluidez y la seguridad vial".
La autopista fue cerrada a las 22.27 horas del jueves 14 y abierta de nuevo a las 3.10 horas de la madrugada del viernes 15. Durante este intervalo, "los vehículos que así lo decidían podían continuar por las vías alternativas", justifica Aucalsa en su respuesta a la familia. "No es cierto. Nosotros no teníamos más alternativa que dar la vuelta y llevar a mi marido al hospital leonés más cercano, como así hicimos", replica la viuda de A. C. G., quien baraja llevar al caso a los tribunales.
