El Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) colocó el pasado año 42 implantes cocleares, de los cuales 15 se les pusieron a niños menores de 7 años. Estos dispositivos electrónicos restituyen el sentido del oído a personas con sordera profunda. El programa de implantes cocleares de Asturias depende del Servicio de Otorrinolaringología del HUCA, que trabaja en colaboración con un equipo multidisciplinar de la Fundación Vinjoy y del Hospital Monte Naranco.

El programa de implante coclear de Asturias, de referencia nacional desde su puesta en marcha en el año 2000, ha permitido colocar 400 dispositivos, de los que 125 se han implantado en niños. El Sistema Nacional de Salud, desde hace cinco años, coloca implantes cocleares bilaterales a todos los niños con sordera profunda al nacer. Esto supone facilitarles una audición útil y una correcta adquisición del lenguaje, lo que provoca un desarrollo académico sal de un niño sin problemas de audición.

Los niños con implantes cocleares proceden del Programa de Cribado Universal Auditivo del Principado, incluido en el Programa de Atención al Déficit Auditivo Infantil. Esta iniciativa de la Consejería de Salud atiende a los menores con hipoacusia profunda y también a otros con hipoacusias de menor gravedad.

La implantación de dispositivos cocleares también se lleva a cabo en adultos que presenten una pérdida casi total de la audición, por una lesión del oído interno, y que no sean beneficiarios de audífonos. Estos implantes han dado resultados satisfactorios en pacientes adultos que habían perdido totalmente el sentido del oído, pero que mantenían el lenguaje.

El 25 de febrero se celebra el Día Internacional del Implante Coclear, que conmemora la primera colocación de este dispositivo. En España 17.500 personas portan un dispositivo de este tipo, de las cuales 2.100 llevan implantes bilaterales.

Estudio genético de hipoacusias

El Servicio de Otorrinos del HUCA está llevando a cabo un estudio clínico prospectivo de los pacientes que tienen implantado un dispositivo coclear. Se estima que un 70% de las personas que tienen sordera se debería a un origen genético.

Esta investigación, además de determinar la causa de la pérdida auditiva, permitirá predecir la evolución de la hipoacusia y así, evitar pruebas innecesarias en pacientes y dar asesoramiento a padres sobre la posibilidad de tener otros hijos con el mismo problema auditivo.

La sordera puede producirse también por infecciones, accidentes, efectos secundarios de fármacos, falta de oxígeno durante el parto o el incremento de la bilirrubina en el nacimiento entre otras causas.