Central Lechera Asturiana (Clas) ha llegado a un acuerdo con la familia Pérez de Guzmán Cavero de Carondelet para comprar su participación mayoritaria (59%) en Biogastur Generación, la compañía titular de la planta de producción energética a partir de purines situada en Armental (Navia) y que pasa por graves dificultades y el impago de salarios a sus 14 trabajadores. Clas, que es dueña del 25% desde la fundación de la sociedad, y que se apartó de la gestión con su salida del consejo de administración en octubre, pasará así a controlar el 84% de la compañía y a asumir su liderazgo.

El propósito de Central Lechera es relanzar la instalación (prácticamente parada) e integrarla en la política del grupo lácteo de cero emisiones y vertidos en las explotaciones ganaderas de sus socios, en sus fábricas y en el transporte. Fuentes conocedoras aseguraron que es previsible que Clas termine haciéndose a corto o medio plazo con el 100% de la compañía mediante la adquisición del 16% que posee Marcos Quevedo Balboa, director general de Biogastur.

En medios al tanto de la operación se aseguró ayer que el director general de Clas, Francisco Sanmartín, comunicará hoy la operación a los trabajadores y al alcalde de Navia. Se sabe que el Gobierno asturiano ha estado implicado en facilitar una salida a la situación de la planta. En los últimos meses se estuvo en tratos con varias compañías españolas y una francesa para su eventual entrada en el accionariado pero no prosperaron.

Biogastur puede procesar 1.000 toneladas diarias de purines y generar metano (susceptible de su empleo como gas o su transformación en electricidad) y digestato, un fertilizante. Tiene una capacidad instalada de 4,5 megavatios.