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"Con la nieve da más gusto estar en casa"

Zarpazo invernal en zonas altas, donde los asturianos amanecieron, en plena crisis del coronavirus, con espesores de hasta 40 centímetros l Pajares cerró para camiones

"Con la nieve da más gusto estar en casa"

Un zarpazo invernal y en plena crisis del coronavirus. Todo un reto para los concejos de montaña, que ayer amanecieron cubiertos de nieve, con carreteras y caminos cortados. El puerto de Pajares estuvo vetado a los camiones durante la mañana, mientras que en Somiedo las quitanieves trabajaron a destajo para despejar viales: los espesores fueron de hasta treinta centímetros en La Peral y Valle de Lago, de veinte en Saliencia y de cuarenta en El Puerto. La nevada fue para muchos una bendición: "Así se lleva mejor el aislamiento en casa, donde apetece meterse con el frío".

En majadas como Tebrandi (Cabrales), en los Picos, cubrió, aunque "la nevada fue pequeña", señaló Patricia Valdés, que vive allí, donde produce queso. Habituados ella y su pareja ,Yuso Romero, al duro invierno, el aislamiento por el virus no les ha alterado mucho la rutina: "Tenemos comida: huerta, pitas, algo de despensa de legumbres, arroz...", dice. Cerca de allí, en Sotres, más de lo mismo. La nieve no alteró el trabajo ganadero, que estos días mantienen su actividad cumpliendo como pueden las medidas de seguridad e higiene.

La nieve se dejó ver en zonas altas del Suroccidente; fue poco el espesor, aunque en los puertos hubo que circular con cadenas o neumáticos de invierno. Una situación que a lo largo de la mañana fue volviendo a la normalidad al dejar de nevar y empezar a llover. Sin incidencias en Cerredo (Degaña) afrontaron este rápido temporal. El alcalde, Óscar Ancares, celebró que la carretera estuvo accesible y se mantuvo la cobertura móvil y de televisión. En el puerto de Leitariegos (Cangas del Narcea) cubrió veinte centímetros, pero a medida que avanzó el día despejó y salieron algunos rayos de sol, como en el resto de Asturias. El presidente de la parroquia rural, Jesús Matías, señala que la nevada es buena para el terreno y para el monte y "sirve para cargar los manantiales".

Hubo susto a primera hora de la mañana en el Alto Aller. Muchos vecinos tuvieron que abandonar sus casas y olvidarse del teletrabajo: amanecieron sin suministro eléctrico. La empresa de mantenimiento tardó poco en atender la llamada, pero hay queja: "Cada vez que caen cuatro copos de nada, nos encontramos sin luz. Es tercermundista".

Estampa navideña en Lena. En Las Ubiñas-La Mesa amanecieron con unos seis centímetros de nieve. "Así da más gusto tener que estar en casa", bromeaban en El Quempu. En Caso la nieve caída no fue en una cantidad destacada, como aseguró el alcalde, Miguel Fernández. Los servicios municipales estuvieron trabajando para despejar las carreteras en los pueblos y a media tarde ya estaba todo abierto.

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