La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"No está previsto de momento parar las obras de la Variante", desvela Adif

"Continuamos con los montajes de vía", señala la empresa ferroviaria l "Habrá que parar si la cuarentena persiste", auguran algunos operarios

"En la variante de Pajares no está previsto de momento parar". Es la respuesta ofrecida ayer por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) a la pregunta de cómo afronta la actual situación de parón casi general provocada por la pandemia de coronavirus y la orden de confinamiento decretada por el Gobierno de Pedro Sánchez. Las obras para llevar la alta velocidad a Asturias, al menos de momento, continúan sin novedad y no se prevén nuevos retrasos. De hecho las empresas concesionarias siguen ejecutando con normalidad "los trabajos de montaje de vía en ambas vertientes" de la cordillera, indicó la empresa estatal que preside Isabel Pardo de Vera.

Adif sale así al paso de los crecientes temores sobre un posible parón de una obra que ya acumula diez años de retraso y que ha supuesto un coste cercano a los 4.000 millones de euros. Fuentes de la obra habían señalado a este periódico la posibilidad de que Adif iniciara durante estos días los preparativos para una paralización momentánea de los trabajos, con la idea de "dejarlo todo preparado para el regreso", una vez superada la pandemia por coronavirus.

La orden de cuarentena dictada por el Gobierno de España ha despertado temores entre algunos trabajadores de Adif en las diferentes obras de alta velocidad en ejecución. En Asturias, un operario de la Variante daba por hecho que si la actual situación persiste "no habrá más remedio que parar".

La preocupación es general. Hace solo unos días, titulares de establecimientos hoteleros de Zamora y Orense, así como trabajadores del AVE a Galicia, mostraron su sorpresa y desconcierto por el hecho de que se hubiera permitido en una situación de emergencia sanitaria el desplazamiento a las obras de grupos de trabajadores procedentes de otras comunidades, entre ellas de Asturias y algunas tan distantes como Cataluña o Extremadura, como publicó el diario "La Opinión de Zamora", del mismo grupo editorial que LA NUEVA ESPAÑA. Al decretarse la cuarentena, los hosteleros zamoranos y orensanos tuvieron que negar el alojamiento a los trabajadores procedentes de otras zonas de España. Los operarios, de hecho, empezaron a hallar también serios problemas para encontrar lugares donde comer.

Los trabajadores de la zona, que regresan cada día a sus hogares, ven por su parte con recelo y preocupación las incorporaciones de esos trabajadores de otras regiones, porque temen que puedan ser un foco de difusión de la pandemia. "El miedo es que son gente que procede de León, Asturias, muchos de Madrid y que están fuera los fines de semana y los lunes vuelven al trabajo. Puede existir un problema", manifestó uno de los obreros de la comarca de Sanabria.

Algunos hosteleros y restauradores de aquella zona manifestaron su rechazo a la continuidad de las obras del AVE, al considerar que podrían dar pie a la propagación del coronavirus entre la población. "Si llevamos ocho años en obras bien podían haber parado unos días, hasta que se recupere la normalidad", expresaron fuentes del sector hostelero. "Estoy sorprendida de que me llamaran (obreros del AVE) porque iban a venir a trabajar y preguntaran si les dábamos alojamiento. Tenemos cerrado desde el minuto cero. Les hacen venir a trabajar desde Barcelona, Asturias y otras comunidades" expresó una hostelera sanabresa, que considera que ahora lo más atinado sería no permitir el movimiento de obreros desde otras comunidades.

Como ahora ha hecho Adif en referencia a las obras del AVE a Asturias, la Subdelegación del Gobierno en Zamora certificó hace unos días que también allí seguirán adelante los trabajos. Y trasladó la responsabilidad del alojamiento y el alimento de los obreros a las empresas concesionarias.

Compartir el artículo

stats