Quizá conscientes de que las fuerzas de seguridad están más preocupadas del coronavirus que de cualquier otra cuestión, los incendiarios están aprovechando la crisis de la pandemia para quemar en diversas zonas de Asturias, presumiblemente con la intención de regenerar terreno para pasto. Ante el incremento de estos fuegos, el Principado ha decidido reanudar las vigilancias preventivas por parte de los agentes de Medio Natural, con el fin de detectar con mayor celeridad los fuegos. La medida venía siendo reclamada por la asociación profesional Agumnpa, que lanzó este mensaje a través de las redes sociales: "Para algunos, el estado de alarma significa barra libre para actuar con egoísmo en su beneficio. En estos días, los servicios de emergencias deberían estar para lo importante, como el Covid-19".
En los últimos días se han registrado incendios forestales en áreas de los concejos de Somiedo; Caso, concretamente en la localidad de Nieves; Piloña, en La Marea; y Sobrescobio, por encima del embalse de Rioseco, donde ya se han registrado otros fuegos en los últimos meses. Al final de la tarde de ayer habían sido apagados todo estos fuegos. La última quema en ser controlada fue la de La Marea, en Piloña, donde estuvieron trabajando los Bomberos del SEPA con base en Infiesto, así como un helicóptero de extinción de este cuerpo del Principado. Las llamas afectaron a una superficie de matorral no arbolada.
Riesgo de incendio
Ayer viernes, el riesgo de incendio no era excesivamente alto en la región. Hoy jueves, será alto en la mayor parte de la región, salvo en algunos concejos del Occidente y varios del centro de la región, como Oviedo o Siero. Esta dinámica se mantendrá en los próximos días, hasta el domingo, jornada en la que regresarán las lluvias y caerán de forma apreciable las temperatura. La nieve también volverá a la región en cotas relativamente bajas: 700 u 800 metros.
