El "preso resucitado", Gonzalo Montoya y su hermana han quedado en libertad, horas después de ser arrestados como presuntos autores de varios robos en el polígono Espíritu Santo de Oviedo. Durante su declaración afirmaron que únicamente cogieron "un gato viejo y unas llantas antiguas" en un concesionario, y que lo que hacían era "trabajar recogiendo chatarra".

Agentes de la Policía Nacional habían arrestado a Montoya como presunto autor de un delito de robo con fuerza, después de que hubiera entrado en varios concesionarios del polígono ovetense, aprovechando que se encontraban cerrados por el confinamiento. El "preso resucitado", que fue dado por muerto en la cárcel de Asturias al sufrir una sobredosis, estaba en el momento del arresto con una supuesta cómplice, su hermana.

Montoya mantiene viva una reclamación judicial por el incidente carcelario. Reclama 50.000 euros a Instituciones Penitenciarias. La petición se tramita en la Audiencia Nacional.