Los diputados autonómicos debatirán en un plazo de dos semanas si se bajan el sueldo como consecuencia de la "hibernación" de la economía por el coronavirus. El presidente de la Junta General, Marcelino Marcos Líndez (PSOE), decidió no incluir este punto en la Junta de Portavoces celebrada ayer con el doble argumento de que esa sesión extraordinaria había sido solicitada por el PP para decidir si se reanudaban ya los plenos y que, además, la rebaja salarial, de prosperar, podría tener un carácter retroactivo. Podemos propone una rebaja salarial del 50 por ciento.

La portavoz de Podemos, Lorena Gil, pretendía debatir en la reunión de ayer, que se celebró por vía telemática, la iniciativa de su partido para reducir en un 50 por ciento el salario de todos los diputados autonómicos "durante el tiempo de duración del estado de alarma". La iniciativa planteaba destinar el dinero de esa rebaja "a financiar el presupuesto de lucha contra el coronavirus COVID-19 desde el sector público" y sugería que, de salir aprobada, tuviera carácter retroactivo, mediante descuentos en las nóminas que cada mes perciben los diputados de la Junta General.

En un segundo punto, Podemos incluso abogó por el establecimiento de "un pacto por la austeridad" de todos los partidos, que consistiría en limitar el salario de los diputados regionales a 1.980 euros netos mensuales (cifra equivalente a 2,08 veces el salario mínimo interprofesional). Esta medida, según los cálculos de la formación morada, permitiría un ahorro cercano a los 3,5 millones de euros en el cómputo global de toda la legislatura en las asignaciones a los parlamentarios, "que debería ir dirigido a paliar las necesidades sociales en los próximos ejercicios presupuestarios". El sueldo de los diputados asturianos oscila entre los 4.152 euros brutos que percibe un representante con dedicación exclusiva y los 4.841 de un portavoz.

Pero el debate de estas medidas tendrá que esperar hasta la celebración de la próxima Junta de Portavoces ordinaria, que tendrá lugar a partir del día 20 de este mes. El presidente del Parlamento asturiano es quien tiene la potestad sobre el orden del día de la Junta de Portavoces y decidió que la naturaleza extraordinaria de la misma, para votar si se reanudaban los plenos como pedía el PP, desaconsejaba introducir la iniciativa de Podemos. Marcos añadió que la posibilidad de aplicar esa rebaja salarial del 50 por ciento con carácter retroactivo desde la fecha en que entró el estado de alarma y no desde que se apruebe en la Junta, si es que finalmente sale adelante, también favorecía el aplazamiento de la discusión y posible votación. Aun así, Podemos presentará una queja formal por este retraso. "En otras ocasiones se han incluido asuntos sobre la marcha y ahora estamos en una situación de excepcionalidad", argumentó Gil. "Los partidos siempre encuentran una excusa para ampliar sus privilegios, pero en este momento excepcional la sociedad no les perdonaría que sigan pensando en su beneficio particular", recalcó la portavoz morada.

Plenos, todavía no

La portavoz del PP, Teresa Mallada, defendió la reanudación de los plenos de la Junta General para que la oposición tenga la capacidad de presentar proposiciones, de realizar un control al Gobierno regional y formular preguntas al presidente, Adrián Barbón, derechos que ahora está viendo recortados. La propuesta del Grupo Popular no prosperó al lograr solo el apoyo de Vox: PSOE e IU votaron en contra, mientras que Ciudadanos, Podemos y Foro se abstuvieron. Mallada acusó a los socialistas e IU de "confinar la democracia" y a los que se abstuvieron les reprochó su "falta de coraje".