El gijonés detenido el lunes tras confinarse con una escopeta recortada y amenazar con suicidarse ante su mujer y sus tres hijos no era la primera vez que lo hacía. Así lo declaró ayer la mujer afectada, que fue quien alertó a la Policía Nacional del brote violento que estaba sufriendo su marido, que, tras ser dado de alta en el área de psiquiatría del Hospital de Jove, permanece detenido en los calabozos de la comisaría de El Natahoyo a la espera de ser puesto a disposición del Juzgado de violencia sobre la mujer de Gijón, que sigue en funcionamiento a diario desde que comenzó el estado de alarma.

Los agentes desplazados trataron de calmarle y negociar que depusiese su actitud, pero él solo decía que le dejasen tranquilo y que se quería matar. Mientras unos policías seguían conversando con él, otros entraron por detrás y consiguieron detenerle sin que nadie resultase herido. Le incautaron, además de la recortada, otras dos escopetas para las que no tenía licencia y que estaban a nombre de un familiar.

"No es la primera vez que discuten. Se insultaban en portugués y ella lloraba. Tenemos miedo de que pase algo", aseguraba una vecina a este periódico el lunes, tras el incidente. Ese testimonio coincide con la versión que ofreció la mujer en la comisaría, donde confesó que no era la primera vez que ocurría un episodio así. El hombre apenas pasó una hora en el área de psiquiatría del Hospital de Jove, desde donde fue trasladado a los calabozos. En principio está detenido por un delito de amenazas graves en el ámbito familiar y también por tenencia ilícita de armas.

Juzgado de Violencia

El hombre pasará al Juzgado de Violencia sobra la Mujer. Éste es el único que sigue funcionando a diario en el Palacio de Justicia de Gijón, con la magistrada titular al frente, tres funcionarios y un secretario judicial rotatorio. Junto a ellos funciona también el Juzgado de Guardia, que se reparte semanalmente entre los cinco magistrados (cuatro juezas y un juez) al frente de cada Juzgado de instrucción de la ciudad. Además, de forma rotatoria, también realizan funciones de guardia un juzgado de cada jurisdicción.

En Violencia se están encontrando en este momento de estado de alarma muchos quebrantamientos de medidas cautelares y condenas, pues muchas parejas han decidido pasar juntas el confinamiento pese a tenerlo prohibido.