El lenense detenido hace unas semanas por llamar "chulos" a los guardias civiles que le impedían ir a cenar a casa de su abuela será juzgado esta mañana en el Juzgado número 4 de Oviedo. En este juicio rápido le acusan de un delito de desobediencia y la Fiscalía pide para él una pena de nueve meses de prisión. No es el primero que se ve este trance. El Juzgado de Grado ya mandó a la cárcel a un vecino de Lugones de 29 años al que pillaron hasta ocho veces saltándose el confinamiento. Se le impusieron seis meses de cárcel y la Fiscalía rechazó la suspensión de la pena, por lo que tuvo que entrar en prisión.

En el caso del lenense al que juzgan mañana, fue sorprendido por la Guardia Civil sobre las nueve de la noche del 9 de abril caminando por una calle de Pola de Lena. Al interrogarle, respondió que iba a cenar a casa de su abuela, admitiendo que ésta no era dependiente. Los guardias le conminaron entonces a regresar a casa. El acusado acabó marchándose, no sin antes llamarles "chulos" y espetarles: "Vergüenza os tenía que dar". Pero no se dirigió a su domicilio, sino que se encaminó nuevamente al de su abuela, en cuyo portal llegó a entrar. Fue en ese momento cuando volvieron a encontrarle los agentes, que reiteraron su orden de que regresase a casa. El individuo no solo hizo caso omiso, sino que les soltó: "Haré lo que me salga de los cojones; vosotros no sois quién para impedirme ir a ver a mi abuela". Los agentes procedieron a su detención, en medio del forcejeo del acusado.

Además, la Guardia Civil de Gijón detuvo en días pasados a tres individuos y tomó manifestación a un cuarto por saltarse el confinamiento varias veces, con el fin de perpetrar varios robos. Sobre las cinco y veinte de la tarde del 13 de abril, se llevaron una batería de un camión y lo intentaron con otros dos, pertenecientes a una empresa de bebidas y alimentación de Llanera. El problema es que fueron grabados por las cámaras de seguridad. Los agentes comprobaron que el coche usado por los ladrones ya había sido empleado para llegar a una segunda residencia de la misma localidad de la que se llevaron varios efectos (unas botas de montaña, unas hamacas, una mesa de centro, un radiador e incluso un tramo de canalón de la parte trasera de la vivienda) tras entrar por una ventana.

Dos días más tarde, la Policía Local de Llanera interceptó el vehículo con tres de los implicados, uno de ellos en la parte trasera, entre material eléctrico y herramienta. Tras recabar el apoyo de la Guardia Civil, se pudo comprobar que tenían 650 metros de cable de distintas clases y herramienta eléctrica procedentes de un robo cometido por esas fechas en una empresa del polígono de Asipo. Otro implicado fue detenido por la Policía Local de Avilés. Hay cuatro detenidos, un menor de edad y tres adultos de entre 19 y 33 años. Aparte de los robos con fuerza y hurtos, se les investiga por desobediencia y a uno de ellos por usurpación de identidad, ya que aportó a los agentes los datos de su hermano.