El Gobierno del Principado está dispuesto a batallar para no quedar "relegado" en el reparto de los 16.000 millones del fondo de compensación no reembolsable que repartirá el Ejecutivo de Pedro Sánchez entre las comunidades autónomas. La consejera de Hacienda, Ana Cárcaba, escenificó el malestar del Ejecutivo autonómico al señalar que "deben ser tenidas en cuenta" las singularidades de Asturias, como el envejecimiento, la dispersión de la población y la elevada inversión en Sanidad.
Tras la reunión del grupo de trabajo de la Junta General para evaluar la situación del coronavirus, Cárcaba subrayó que el debate sobre el reparto del dinero se mantiene "abierto" y admitió que el importe que le corresponda a Asturias "difícilmente va a cubrir el déficit presupuestario" que está generando la crisis del coronavirus. Detalló que la estimación del Principado eleva el gasto autonómico a 103,8 millones y la previsión de pérdidas de ingresos en unos 150 millones, aunque remarcó que las cifras pueden variar.
La Consejera reclamó que el reparto tenga en consideración las "especificidades" de Asturias, como el elevado envejecimiento poblacional, la dispersión territorial y la inversión sanitaria, que supone el 40 por ciento del Presupuesto autonómico y se encuentra entre las más elevadas por habitante del Estado. También considera que deben tenerse en cuenta "todas" las pruebas PCR realizadas en Asturias desde el inicio de la pandemia, y no solo aquellas que han resultado positivas. Asturias es la segunda región de España, tras La Rioja, que más test PCR ha realizado por 100.000 habitantes, y se sitúa solo por detrás de dos países en el mundo, Islandia y Luxemburgo.
Cárcaba reclamó a los grupos políticos asturianos que trasladen a sus partidos en Madrid los criterios "justos y necesarios" que el Principado requiere para el reparto de los fondos de compensación, dado que se constituirán mediante un decreto ley, que debe ser convalidado en el Congreso de los Diputados.
El Gobierno del Principado lo tiene muy claro: rechazará que los 16.000 millones del fondo no reembolsable para las comunidades se reparta en función de la población o de la incidencia de la pandemia de coronavirus. "No sería justo" para Asturias, tal y como ha manifestado en varias ocasiones el presidente del Principado, Adrián Barbón, quien resalta que Asturias, pese a su escaso peso poblacional, invirtió "muchos recursos públicos en prevenir antes que lamentar, gracias a lo cual, junto con la labor de los sanitarios, siempre hemos ido por delante" en la lucha contra la pandemia.
El Principado buscará el acercamiento a otras comunidades, fundamentalmente las del Noroeste, Galicia, Cantabria y Castilla y León, así como Aragón, que comparten el criterio de que se tenga en cuenta la "población equivalente protegida". La idea es crear un "frente común" para conseguir un reparto de los fondos que tenga en cuenta otros criterios además de los poblacionales. De esos 16.000 millones, 10.000 se destinarán a compensar el exceso de gasto sanitario registrado a causa de la pandemia, 5.000 millones a compensar el desplome de los ingresos públicos de las comunidades respecto a lo estimado en sus presupuestos, y los 1.000 millones restantes al exceso de gasto sociosanitario.
Apoyo del PP
El PP ofreció su "apoyo" al Ejecutivo para "defender juntos" un reparto de las ayudas del Gobierno "que favorezca al Principado". La portavoz del PP, Teresa Mallada, resaltó que Asturias "se juega mucho en ese reparto" y que es "vital que todos nos unamos en esa defensa". Reclamó "valentía" a Barbón para que "deje a un lado su habitual partidismo y seguidismo sin matices a las políticas de Pedro Sánchez y defienda los intereses de Asturias".
