El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha garantizado esta mañana en la Junta General que no prevé que el cierre de algunos consultorios periféricos decretado al inicio de la pandemia para optimizar los recursos sanitarios de la economía no será definitiva. Barbón respondió de ese modo a las dudas que en la sesión de preguntas al presidente, la segunda desde el comienzo del estado de alarma, le plantearon los portavoces de PP y Foro. No respondió a la petición del portavoz forista, Adrián Pumares, de fechas aproximadas para la reapertura, aunque sí reconoció que cuando todo esto pase, "no lo niego", "vamos a tener un problema con las listas de espera" y que el sistema sanitario asturiano se verá sometido a la exigencia de "un gran esfuerzo, porque habrá mucho tiempo que recuperar".
Barbón, muy preocupado por hacer ver que "el virus no ha pasado", que sigue en las calles el riesgo cierto del rebrote, quiso que se valorase también, no obstante, la respuesta de la sanidad asturiana a la pandemia, "que está teniendo reconocimiento a nivel nacional", entre otras materializaciones concretas con la contratación "a mayores" de 1.243 profesionales.
A la mención de la portavoz de Ciudadanos, Laura Pérez Macho, sobre la "vergüenza nacional" de la inflación de fallecidos en residencias de mayores, el jefe del Ejecutivo autonómico ve claro que como todas las administraciones la suya ha cometido errores, que "el desconocimiento del virus nos ha hecho a todos" incurrir en ellos y que con lo que sabe hoy "habríamos actuado de otra manera", pero también, una vez más, que Asturias ha respondido mejor que otras autonomías. Quiso valorar junto a las tragedias algunas victorias, como que "casi el setenta por ciento de las personas infectadas en residencias se ha curado" o que "en Asturias el ochenta por ciento de los residentes han fallecido en hospitales y el resto en residencias medicalizadas. En algunas autonomías, siguen sin medicalizar ni una sola".
