La Consejería de Educación disipó las dudas de la enseñanza concertada y mantendrá la opción de la solicitud presencial de plaza para nuevos ingresos o cambios de destino en los centros educativos sostenidos con fondos públicos. La introducción ya anunciada de la versión telemática en el procedimiento de la admisión de alumnos no será exclusiva y convivirá con la posibilidad de gestionar la petición en los propios colegios o institutos. Las inscripciones se admiten in situ, pero con cita previa y respeto a unas instrucciones básicas de seguridad sanitaria, y el proceso, cuyas bases, calendario e instrucciones fueron publicados ayer en el Boletín Oficial del Principado (BOPA), fija para el 15 de junio próximo la publicación de las vacantes para nuevos ingresos y cambios de centro y entre el 15 y el 19 el periodo de presentación de solicitudes de admisión en las elecciones como primera opción.
El día 30 se publicarán las listas provisionales de admitidos y rechazados, se habilitarán los dos días siguientes para formular alegaciones y el 14 de julio saldrán las definitivas. Todo echará a andar, como estaba previsto, este viernes a las diez de la mañana con el "sorteo de la letra", el que decidirá, en caso de empate a puntos, a partir de qué apellidos y en qué dirección alfabética empieza la preferencia en la selección.
Para las matriculaciones de infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato se han reservado los plazos del 23 al 31 de julio y del 1 al 7 de septiembre, y todo el proceso de admisión y matriculación, del que están pendientes unas 19.000 familias, arranca en Asturias con un apreciable retraso y muy condicionado por las incertidumbres del estado de alarma. La innovación de la convivencia entre el trámite online y la gestión presencial tranquiliza a Escuelas Católicas de Asturias, que había entrevisto la sombra de un posible exceso de control de la Administración detrás del anuncio en el que la Consejería planteó, en plenas restricciones de movilidad por la pandemia, un sistema de gestión telemática y centralizada de las solicitudes. Temían que la supresión del contacto físico dejase a los centros relegados al papel de meros receptores de instancias sin vínculo alguno con los padres y que se obstaculizase el derecho a la libre elección que asiste a las familias.
La aclaración de ayer les sosiega. Mantener las visitas era lo lógico, a los ojos de Carlos Robla, secretario general de Escuelas Católicas, si se tiene en cuenta que "los colegios han abierto esta semana" -para labores de desinfección y preparación de una posible vuelta voluntaria a las aulas a partir del lunes en los cursos terminales de cada ciclo- y que a estas alturas de la pandemia "todos tenemos interiorizadas las medidas de seguridad". La visita a los centros, añade, ayuda a los padres a elegir partiendo de evidencias directas sobre el servicio que van a recibir sus hijos -"a la gente le gusta verlo para decidirse"- y es posible garantizar que se haga sin riesgo, "igual que ir al supermercado o a la farmacia".
Para las solicitudes presenciales en tiempos de pandemia, en efecto, el Principado exigirá, además de la cita previa, que en los centros se guarde la distancia de dos metros o se use mascarilla si no es posible, que se organicen la circulación de las personas y la distribución de espacios para evitar aglomeraciones, que se mantenga la separación requerida entre los trabajadores y los usuarios y, en general, que se apliquen las instrucciones dictadas desde la Administración para la apertura de las instalaciones educativas.
Algunos centros han comenzado ya a adaptarse a esta nueva realidad con instrucciones en las que exigen, además de la mascarilla, la atención a una sola persona que vaya provista de su DNI y hasta que lleve su propio bolígrafo si cumplimenta la solicitud en las instalaciones.
Para estas solicitudes de admisión in situ, los impresos estarán disponibles en el portal Educastur, que también alojará el formulario para la presentación y tramitación a distancia, o en los propios centros. Las matrículas -previstas para el tramo final de julio- estaban ya programadas en formato presencial.
Los criterios de admisión valorarán si el alumno tiene hermanos matriculados en el centro, si sus padres están empleados allí y si padres o tutores trabajan cerca. También el nivel de renta, si la familia es numerosa o monoparental o si el solicitante se encuentra en situación de acogimiento familiar, su expediente académico o posibles grados de discapacidad en la familia.
