Faltan enfermeras en Asturias, y la situación se dibuja acuciante. Ya escasearon profesionales durante los momentos más críticos de la pandemia de covid-19. En el momento actual, las plantillas están "al límite". Y en los próximos meses la escasez será aún más patente, pues toca dar vacaciones y días libres pendientes a un colectivo que, en parte, ha estado muy exigido por los rigores del coronavirus. Además, el establecimiento de dos circuitos en los centros sanitarios -uno para pacientes contagiados y otro para no contagiados- obliga a incrementar la contratación de profesionales.

Todo ello ha llevado a los responsables del Servicio de Salud del Principado (Sespa) a pedir a las distintas unidades y áreas de los hospitales que limiten la incorporación de enfermeras. Asimismo, en los ambientes sanitarios no se descarta que la Administración acabe optando por reordenar los periodos vacacionales, una medida que los sindicatos califican de "nada justa y muy delicada, porque el personal está al borde del agotamiento físico y mental", según indicó ayer a este periódico Graciela Martínez, de Usipa-Sicepa.

La disponibilidad de enfermeras, como la de médicos, lleva años siendo precaria. "En Asturias y en toda España", enfatizan los responsables sanitarios para descargarse de responsabilidad. Con el añadido de que, para los gestores sanitarios, suele resultar más sencillo lidiar con una escasez eventual de facultativos que con una carencia de enfermeras, pues en el caso de estas últimas una porción muy relevante del colectivo -quizá el 70 u 80 por ciento- trabaja a turnos que deben ser cubiertos.

En estas semanas pasadas de crisis sanitaria extrema, se registraron bajas de profesionales por contagios y contactos, apartamientos preventivos por factores de riesgo, necesidades de reforzar las plantillas sanitarias... Además, el Principado "medicalizó" numerosas residencias de mayores, y un notable contingente de enfermeras asumió estas funciones sobrevenidas. El Sespa ya da por descontado que serán contratadas -algunas adelantaron los plazos y ya lo han sido- todas las profesionales noveles que en estas semanas salen tituladas de las facultades de Enfermería de Oviedo y Gijón.

A juicio de Usipa-Sicepa, la situación descrita "no es fácil para nadie". Sin embargo, "un elemento que sí está en manos de los gestores es fidelizar al personal eventual, porque los contratos ofertados suelen ser de muy corta duración, y se añade el hecho de tener que trabajar hasta quince días con dos descansos intercalados, con sus turnos de mañana, tarde y noche", puntualiza Graciela Martínez.