Setenta y seis centros educativos asturianos volverán a contar a partir de hoy con alumnos en las aulas. Han sido 3.066 los estudiantes que solicitaron de forma voluntaria reanudar hoy las clases presenciales en setenta institutos y en seis centros públicos de educación básica (CPEB) que engloban en el mismo recinto enseñanzas de Infantil, Primaria y Secundaria Obligatoria. A ellos, hay que sumar el alumnado citado para tutorías de cuarto curso de la ESO en los centros concertados.
Fueron en concreto 2.218 estudiantes de segundo de Bachillerato los que expresaron su intención de acudir durante las próximas tres semanas al aula para preparar la evaluación del Bachillerato para el acceso a la Universidad (EBAU) en institutos públicos (el Bachillerato en los centros privados no tiene concierto educativo), según los datos que maneja el Gobierno del Principado. Otros 271 alumnos se reincorporarán a sus centros para ultimar proyectos de ciclos superiores de Formación Profesional, y, por último, 577 estudiantes de cuarto de la ESO han sido citados por sus tutores para acciones de refuerzo.
La Consejería de Educación dictó una resolución el pasado 25 de mayo por la que se ordenaba la incorporación presencial del personal docente necesario para atender al alumnado en la actual fase 2 de la desescalada, que rige en Asturias. La norma establece una serie de medidas organizativas, de higiene y de adecuación que los centros han asumido para esta etapa. Así, por ejemplo, tanto los profesores como los alumnos tendrán que usar mascarilla y tendrán asimismo que estar a dos metros de la persona más cercana. Además, no habrá eventos grupales y los movimientos por el centro se limitarán al máximo, solo se permitirán los imprescindibles. Habrá flechas y marcas en el suelo para evitar contactos, y no podrán asistir a los centros quienes presenten síntomas compatibles con coronavirus o tengan la enfermedad, ni aquellas personas que se encuentren en periodo de cuarentena domiciliaria por haber tenido contacto con algún infectado.
La actividad en el aula se reanuda también para el profesorado que forma parte de los tribunales y de las comisiones de las pruebas de acceso a las distintas enseñanzas y de los exámenes para la obtención de títulos, así como para el personal de orientación y psicopedagogía que tenga que protagonizar estos días tareas relacionadas con la escolarización.
El alumnado debe cumplir las medidas generales de protección e higiene antes citadas, así como las que cada centro haya establecido para el uso de las instalaciones, especialmente el respeto a la distancia de seguridad. Por ejemplo, en algunos centros educativos se tomará la temperatura a los alumnos a la entrada.
El personal docente, por su parte, deberá seguir las recomendaciones recogidas en el protocolo de salud para la prevención de contagio por covid-19 en el ámbito laboral, disponible en la intranet de Educastur, así como las instrucciones de la Consejería.
El retorno a la actividad lectiva presencial ha provocado duras críticas por parte de los sindicatos docentes, principalmente, por las condiciones en que lo ha planteado el Principado, haciendo descansar sobre las direcciones de los centros toda la responsabilidad en lo que se refiere a organización de dispositivos y compra de materiales de protección. De hecho, algunos sindicalistas han lanzado severas advertencias sobre los riesgos a los que se expondrá a partir de mañana tanto el personal docente como los estudiantes.
Junto a los representantes de los trabajadores, algunas familias han manifestado también su extrañeza por la exigencia de que los padres o tutores de cada alumno suscriban una "declaración responsable" que garantice que su hijo está en condiciones de acudir al centro. Es, según los sindicatos, otro intento de la administración de descargarse de la responsabilidad si surge algún contratiempo.
