Los nuevos criterios de reparto del fondo estatal de 16.000 millones por el impacto del covid-19 revisan al alza el peso del envejecimiento de población, como pedía Asturias que se hicera para lograr una mejor compensación en dicha distribución de fondos. Además, habrá 2.000 millones añadidos para compensar aspectos relativos a la educación. Varios gobiernos autonómicos como Cataluña y Castilla-La Mancha se han mostrado críticos con los baremos del nuevo reparto, que ha sido propuesto por Pedro Sánchez en la videoconferencia de Presidentes celebrada esta mañana, la decimotercera desde el inicio de la crisis sanitaria.

"Se recoge una propuesta fundamental para Asturias, al valorar no solo la población sino la protección protegida equivalente, que tiene en cuenta factores como los mayores de 65 años. Es muy importante y beneficia de forma fundamental a Asturias", valoró el presidente del Principado, Adrián Barbón, quien también señaló otra medida "beneficiosa" para el Principado, como la estimación de todas las pruebas PCR y no solo las que habían dado positivo,como estaba previsto inicialmente. El presidente regional también valoró positivamente que 2.000 millones de ese fondo estatal se destinen a la educación "para el nuevo curso, a partir de septiembre". Este jueves, indicó Barbón, habrá una reunión con el Gobierno central para definir la vuelta a la actividad en los colegios "con seguridad" para los alumnos y el personal docente.

El fondo de la sanidad, dotado con 9.000 millones, prevé dos tramos para la aplicación del reparto: en el primero, de 6.000 millones, la población protegida equivalente pasa de pesar un 20 por ciento a un 35 por ciento, atendiendo una de las reclamaciones planteadas por el Principado. En la población protegida equivalente se pondera la edad de los ciudadanos y no solo el número de habitantes de una comunidad, ya que el coste sanitario de los tramos de más edad es mucho mayor. En el segundo tramo sanitario, de 3.000 millones, el peso poblacional pasaría del 40 al 45 por ciento. Además, tambien se valorará el número total de pruebas PCR, en las que la sanidad asturiana está a la cabeza de España, y no solo las que han dado positivo, como se preveía inicialmente, según fuentes del Principado.

Una de las novedades en ese reparto es el destino de 2.000 millones para la educación que, en principio, se repartirá atendiendo a la población. Gobiernos como el de Castilla La Mancha se han quejado del incremento de la población protegida equivalente pues se hace a costa del criterio que valoraba la incidencia directa en número de contagiados y muertos.