El preso acusado de introducir 1,7 gramos de cocaína en la cárcel de Asturias, en marzo del año pasado, ha asegurado esta mañana en la sección tercera de la Audiencia Provincial que la droga era para su consumo propio. El forense corroboró que se trata de un preso enganchado a la droga desde su juventud, por lo que la defensa, a cargo de Ignacio Botas, ha solicitado que se aplique la eximente completa de drogadicción. No obstante, el ministerio público mantuvo su petición de siete años y nueve de cárcel, aplicando la agravante de reincidencia.

El Ministerio Fiscal sostiene que, el día 29 de marzo de 2019, se ocuparon al acusado 5 envoltorios de cocaína, que arrojaron un peso de 1,71 gramos y una pureza del 89,8 por ciento, destinados al tráfico ilícito dentro del establecimiento penitenciario. La droga fue encontrada oculta en la ropa interior del acusado, en el módulo 8 del centro. El valor de la misma es de unos 100 euros. El juicio quedó visto para sentencia.