Los últimos datos del coronavirus en Asturias dejan la idea de una epidemia contenida pero aún peligrosa, con un nuevo contagio que eleva la cifra total de personas infectadas a 2.438 asturianos. Para el departamento de Salud del Gobierno regional las cifras que dan cuenta de lo sucedido en el día de ayer -el anterior se correspondía con la información del domingo 14- no implican que haya que añadir ningún fallecimiento nuevo, por lo que la cifra de muertes sigue en 332 casos. También permanece estable, como el día anterior, la de pacientes ingresados en la UCI (12 en total), aunque se incrementa en dos nuevos casos la de ingresados en otras planta hospitalarias (el total es de 9 ingresados respecto a los 7 del domingo).

Pero en Asturias la contabilidad de casos de covid es doble: la que hace la Consejería de Salud y la que hace la Consejería de Derechos Sociales y que centra el foco exclusivamente en lo que ha sucedido y sigue sucediendo en las residencias de ancianos.

En este segundo balance las cifras de hoy martes sí que arrojan resultados significativos ya que la cifra de fallecimientos se ha elevado en dos casos más, hasta los 226, siendo en total 681 los residentes contagiados. Portavoces oficiales del departamento que lidera Melania Álvarez han comunicado que en la revisión de datos que ha hecho el Servicio de Vigilancia Epidemiológica “nos han notificado cuatro fallecimientos ocurridos en fechas anteriores”. Concretamente se trataría de cuatro residentes que dieron positivo por covid-19 y cuyas defunciones ocurrieron los días 21 y 27 de mayo, y 4 de junio, en los centros residenciales Naranco, Jovellanos, en el Hospital Gijón y en la residencia Plaza Real, estos tres últimos de Gijón.

El hecho de que en la cifra final sumen solo dos resientes más fallecidos y no cuatro se debe a que en esa misma revisión las autoridades consideran que procede restar otros dos casos que sí estaban incluidos entre los fallecimientos de ancianos ya que se ha determinado que “la fuente de contagio no fue el centro residencial, y el fallecimiento tuvo lugar en un centro hospitalario, por lo cual no procede contabilizar esos fallecimientos en las propias residencias”. Concretamente, los fallecimientos que se descuentan del total “se corresponden con una defunción que se había atribuido a la residencia La Golondrina, ocurrida el 6 de junio, y otro de un residente del centro Palacio de Leceñes, registrado el 22 de abril”.