Una investigación de la Universidad de Oviedo y el Servicio Regional de Desarrollo Agroalimentario de Asturias (Serida) evidencia los efectos positivos de la biodiversidad animal en la cosecha del manzano de sidra de Asturias, demostrando por primera vez los beneficios simultáneos de las aves insectívoras y de los insectos polinizadores. Los investigadores encontraron que el control biológico sobre insectos plaga mejora en aquellas fincas que albergan más especies de aves como petirrojos, carboneros o currucas, entre otros. El cuajado de los frutos aumenta en los manzanos que reciben más visitas y más especies de insectos polinizadores. A la vista del estudio, publicado en "Agriculture, Ecosystems and Enviroment", los investigadores animan a los agricultores a fomentar la biodiversidad, apoyados por políticas europeas de agricultura sostenible. Este año el manzano tendrá por primera vez ayudas de la PAC.