El porcentaje de alumnos que se descolgó del sistema educativo durante el estado de alarma es superior al atribuido a la brecha digital. Así lo recoge una encuesta elaborada por la Consejería de Educación sobre las clases telemáticas, en la que participaron más de la mitad de los profesores de Asturias. Una de las conclusiones del trabajo es que la desconexión de una parte del alumnado no solo se debió a la falta de recursos tecnológicos, sino probablemente a una desmotivación. Por ello, tanto para la Ministra como para la Consejera la prioridad es retomar la formación presencial el próximo curso. La titular de Educación, Carmen Suárez, insistió en ello ayer en una reunión con las asociaciones de padres y madres de alumnos: Concapa, FAPA Miguel Virgós y FAPA Xixón. Las familias exigieron al Principado saber cuanto antes sus planes: "Necesitamos organizarnos; no nos vale con que nos lo digan el 1 de septiembre". La Consejera no avanzó medidas, solo les señaló que están en estudio y que "no contentarán a todo el mundo". La Ministra Celaá dijo precisamente ayer que intentarán que las escuelas "sigan abiertas aunque haya un rebrote" en otoño.