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De la caleya al hormigón

Calvo debuta en la Junta como nuevo responsable de Infraestructuras, área que compaginará con Medio Rural

El consejero Alejandro Calvo, en una visita a una finca de Serín. Marcos León

Alejandro Calvo se estrenó ayer en la Junta General como nuevo responsable de la consejería de Infraestructuras, área que compaginará con Medio Rural, el departamento que ya había asumido al inicio de esta legislatura. El debut fue intenso, con dos temas que han sido una "patata caliente" para sus predecesores: la Variante de Pajares y el proyecto de la Zalia, actuaciones empantanadas en lustros de retrasos. "Estamos en la legislatura final para ambas", sostuvo Calvo, primero sometido al "fuego amigo" del coordinador general de IU de Asturias, Ovidio Zapico, y luego al menos amistoso del portavoz adjunto del PP, Pablo González.

De la caleya, el ganado y los prados, al hormigón y a la alta velocidad en apenas una semana. Alejandro Calvo, ingeniero agrónomo, acumula a sus 45 años una amplia trayectoria en puestos de responsabilidad en el Principado: gerente de la Sociedad Gestión de Infraestructuras Culturales, Turísticas y Deportivas; director gerente de la Sociedad Pública de Turismo y Cultura; director general de Política Forestal y exviceconsejero de Cultura. De entrada, se comprometió a "buscar el encuentro, para abordar estos retos con la solidez que no siempre ha habido", e hizo votos por dar continuidad "a la gestión de los equipos que trabajan con solvencia" . Uno de los altos cargos que recibe de Infraestructuras es Jorge García, director general de Movilidad. Calvo se autoimpuso el objetivo de "la cohesión territorial, huyendo de un debate que se ha territorializado y comarcalizado". Tablas tiene el nuevo consejero, que no soltó prenda pese que el portavoz adjunto de IU le preguntó, por dos veces, sobre la conveniencia de hacer una nueva estación ferroviaria en Pola de Lena cuando la alta velocidad entre en Asturias. Zapico insistió en la necesidad de "centrar los esfuerzos en las cercanías". El nuevo consejero reconoció "las décadas de deterioro de la infraestructura" y recalcó que el objetivo prioritario "es el plan de choque", ya en marcha, para evitar averías y conseguir nuevos trenes, como los 10 adjudicados este lunes.

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