La coordinadora federal de IU ratificó ayer el acuerdo que debe poner fin a la controversia con la organización en Asturias y conjurar los riesgos de ruptura que generaron las desavenencias por el método de elección de la coordinadora asturiana en la asamblea de febrero. La designación de los miembros del organismo entre los delegados del cónclave chocaba con los estatutos federales, que exigen primarias abiertas a la militancia, y eso hizo crecer una disputa interna que representantes de las dos organizaciones han resuelto fijando una votación en septiembre. La coordinadora renovada debería ratificar al coordinador, Ovidio Zapico, designado tras un proceso de primarias.

En cuanto a la fórmula de encaje entre los estatutos federales y los asturianos, el punto de encuentro dice que la norma nacional regirá los procesos en el ámbito estatal -de acuerdos con otras formaciones o composición de listas, por ejemplo- y la asturiana decidirá en los circunscritos al Principado.